Capítulo trece.

117 17 29
                                    

—¡Eso, no puede ser, yo no puedo estar muerta!— comenzó a llorar

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—¡Eso, no puede ser, yo no puedo estar muerta!— comenzó a llorar

—Bulma, tienes la opción de vivir o morir, si en menos de 24 horas no bebes ni una gota de sangre morirás, pero si es todo lo contrario, serás un vampiro—

—Yo... no lo sé, estoy muy confundida y hambrienta— se quedó callada unos segundos— ¿Dónde están mis padres?—

—Nena, ellos... murieron, había escuchado como el auto se hundió en el agua, me dirigí hacia allí, estuve por ayudar a tu padre, ya que estaba algo herido, pero se negó, me pidió que te salvará a ti primero, por lo que pude ver tu madre murió cuando su cabeza se impactó en el vidrio, les pedí a mis amigos que los sacarán para poderles dar una santa sepultura— le dijo apenas audible, pero ella lo alcanzó a escuchar

Un grito desgarrador se hizo presente en toda la cabaña. Bulma sentía como su corazón se partía en mil pedazos, está en transición para ser vampiro y también había perdido a sus padres, todo en un solo rato.

¿Acaso su vida no podía ser más jodida?

Quería gritarle y reprocharle a Vegeta por no haber salvado a su padre, por dejarlo morir. Ella prefería estar muerta en estos momentos, jamás pensó que su vida cambiaría tanto al involucrarse con el, todo el mundo le advirtió pero ella no quiso entenderlo, corrió el riesgo y ahora ahí estaban las consecuencias de sus actos. Prefería secarse y morir para ver a sus padres y pedirles perdón, pero no iba a ser una cobarde, le dolía y mucho, pero no por nada habían chocado.

Los recuerdos del accidente golpearon su mente y recordó cuando una persona se puso frente a ellos y eso provocó aquel accidente, encontraría a esa persona y le haría pagar por eso, ella misma se había arruinado la vida al meterse en un mundo dónde nunca perteneció, pero su terquedad y amor fueron más grandes.

—¡Mis padres no pueden estar muertos, dime qué es una maldita broma, dímelo!— rogaba entre gritos

Se paró y se colocó frente a Vegeta para mirarlo con furia, mientras las lágrimas seguían saliendo sin parar. Alzó sus puños y comenzó a golpearlo en su pecho y rostro, por un momento se sorprendió por su fuerza, pero lo que más la dejo confundida fue que el no se defendiera. Solo tenía sus manos en sus costados, mientras recibía aquellos puñetazos, sabía que el se merecía esa golpiza, se sentía tan miserable al ver a la mujer que ama de esa manera.

La sangre comenzó a brotar de el, eso comenzó a desesperar a Bulma, esperaba a que el la atacará pero eso no sucedía. Sacaba su furia, tristeza y dolor con aquellos golpes y palabras hirientes, sus nudillos se pusieron blancos por la fuerza que ella ejercía y rojos por la sangre que comenzaba a brotar de estos, no le importaba, era más grande el dolor que sentía al haber perdido a sus padres.

—¡Por tu culpa mis padres están muertos, te vas a arrepentir, Vegeta Ouji, desde que me involucre contigo solo he sufrido, he perdido lo más sagrado que tenía, los malditos hijos de puta de tu raza los mataron!— con cada palabra daba un golpe con más fuerza

𝐖𝐢𝐭𝐡𝐨𝐮𝐭 𝐘𝐨𝐮. ||𝐕.𝐁||Where stories live. Discover now