Intercambiamos números y descubrimos que teníamos un lugar favorito en común, La playa. Al llegar a mi casa, les presente a Mis Papás a Romeo. Les dije que era un buen amigo y que el se había ofrecido a traerme a casa. Nos despedimos de Romeo y le agradecí por llevarme a casa.
Pasaron los días y nuestra confianza con Romeo iba creciendo, jamás pensé que el me iba hacer sentir tan bien, tan segura y tan amada.
Era un caluroso jueves y Romeo me invitó a la playa, estábamos de vacaciones, tiempo libre para poder disfrutar, pedí permiso a mis padres los cuales dijeron que si. Estaba muy contenta por poder ir y pasar mi día con él.
Paso por mi casa muy temprano, íbamos en su automóvil rojo por la carretera,recuerdo la brisa acariciaba dulcemente su cabello, y él sonreía como si no hubiese un mañana. No podía creer lo feliz que estaba al verlo a mi lado.
Suavemente sentí como sus manos se entrelazaron con las mías,fue el momento mas espléndido de mi vida.
Al llegar a la playa, las olas sonaban y sonaban se sentía una brisa tan fría y cálida a la vez, me senté a la orilla de la playa para ver el mar.
El sonido del mar me da tanta paz y tranquilidad que me hace olvidar, lo cruel y duro que puede ser el mundo....
