CAPITULO 2 (1º PARTE)

305 16 1
                                    

LA CONSULTA

Mis abuelos, al igual que los padres de mi mejor amigo estaban en una reunión con Ester, y supongo que también con Hit, era ya de noche y Darío me pidió ayuda para grabar uno de sus videos

- Ya, así, despéinate un poco – le arregle un poco – realmente todavía no sé porque te dejo hacer esto. Sabes que me da miedo que hagas esto, eres muy buen bailarín, pero no me gusta que hagas esto para conseguir dinero, algún día pueden enfadarse y hacerte daño

- Sabes que huyen cuando se enteran que soy menor, no te preocupes – beso mi frente – ahora, pon el móvil a grabar por favor

Le coloque el móvil mientras el bailaba, terminando por quitarse la camiseta, tirándomela a la cabeza y siguió sexualizando algo más el baile. No negare que me gustaba como bailaba mi mejor amigo, pero tenía demasiado miedo por él.

Cuando Darío termino, colgó el video en la página y me miro, puso otra vez música y me tendió la mano

- Vamos! Baila conmigo – cogí su mano y ambos nos pusimos a bailar un rato, hasta que estuvo demasiado cansado y nos tumbamos en el suelo de su cuarto – ya han subido la puja – me dijo cuando sonó su móvil, 120€– susurro y yo me acerque a la ventana

- Ya han vuelto – dije al ver el coche de su padre aparcar y como bajaban mis abuelos y sus padres del coche. No tardo en oírse discutir a sus padres en la puerta. Darío se puso rápidamente la camiseta y se sentó en el escritorio, me acerque a él y me senté a su lado en la cama

- Se puede? – pregunto su padre después de tocar la puerta

- No! – contesto bastante borde Darío, a lo que puse mi mano sobre su hombro

- Es que venimos del colegio y... Quiero preguntarte una cosa – siguió su padre

- Ahora no puedo, estoy ocupado

- No haces nada – le susurre

- Emma? – parece que me oyó – tus abuelos querrán hablar contigo – Solo será un minuto Darío – intento abrir la puerta, pero le habíamos puesto el seguro antes de que vinieran – te he dicho mil veces que no trabes la puerta – comenzaba a enfadarse – Darío, abre!

- Que haces con la puerta? – contesto mi mejor amigo al ver que su padre movía la puerta casi sacándola del marco – Golpeo yo tu puerta para que veas?

- Intento hablar contigo – le dijo más tranquilo

- Estoy desnudo, ahora no puedo – le contesto Darío y le di un golpe en el brazo

- Pero que dices? – le susurre más bajo que antes – estás loco? Van a pensar que...

- Está bien, cuando bajes a cenar hablamos – dijo algo avergonzado

- No pienso bajar a cenar

- Si vas a bajar a cenar, los dos!

- No pensamos bajar a cenar, no tenemos hambre y no me puedes obligar, y menos a Emma. Adiós – dio por termina la conversación y le sonó otra notificación – 140 – me susurro y le negué

- No lo hagas Darío, por favor

- Vamos – se levantó poniéndose la chaqueta y la capucha y me paso una de sus chaquetas – me acompañas? – le asentí cogiendo la chaqueta y poniéndomela, igual que la capucha de la misma. Iba con su brazo por mis hombros, como casi siempre

- Darío – su padre nos detuvo en el garaje

- Que? – contesto mi amigo

- A dónde vais? – nos preguntó Manuel – son las once y media

- Hemos quedado con unos amigos, y después la llevare a casa antes de las doce y media

- Que amigos? – volvió a preguntarle mientras Darío cogía su patinete con una mano, con la otra seguía abrazándome

- Unos amigos. No los conoces, que más te da? – volvió a contestar Darío

- Y a qué hora vas a volver? – ahora le pregunto su madre

- Pronto. Dejare a Emma y volveré

- Antes de las doce y media volveremos Beatriz – le dije más amablemente, su madre no tenía ninguna culpa de la personalidad de Darío, realmente ella se preocupaba por él y por mi

- Cariño mírame – le dijo su madre a la vez que mi mejor amigo me soltaba para subirnos al patinete. Cuando se acercó intento coger la barbilla de Darío para que este la mirara

- Que haces? – dijo mientras de un manotazo le quitaba la mano

- Solo te iba a tocar la cara – le dijo su madre

- No me gusta que me toquen – les grito, le cogí la mano para intentar calmarlo y su padre nos miró algo mal

- Es tu madre joder! – le grito su padre

- He dicho que volveré pronto

- Tu madre no se merece que la trates así – le amenazo su padre y Darío solo los miro.

Darío solamente paso su brazo por mis hombros y me empujo para irnos, cuando llegamos a donde había quedado para que le pagaran me hizo bajar del patinete, me adelanté y pase andando por el coche que supuestamente iba a pagarle a Darío, y seguí andando poco más, me escondí tras un árbol a la espera de que Darío cobrara y viniera a por mi.

- Listo, nos vamos – dijo llegando a donde estaba – le saque la foto y lo amenace con que era delito al ser menor

- Sigo odiándolo. Borra la foto Darío... no quiero que tengas problemas – Darío borro la foto y nos fuimos a casa, me dejo en mi casa – paso mañana a buscarte? Como siempre?

- Ya lo sabes – lo abrace y le di un beso en la mejilla – llámame si pasa algo, o vente a casa, la ventana siempre está abierta, ya lo sabes

- Te quiero, descansa – me dijo antes de darme un beso en la frente y que me fuera a mi casa

Los Malditos 10 - HIT serieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora