Un niño en Brahman

07

Otro día..
Día en la cual le tocaba ir a la escuela, antes no le gustaba ir, ya que se la pasaba solo, pero había hecho un amigo y con todos los ánimos se levantó antes de que Benkei venga a levantarlo. Salto de la cama y se puso sus pantuflas de conejo, tomo si uniforme y su toalla de dinosaurio.

Abrió la puerta del baño, lo bueno de tener un baño propio, sino iba estar peleando con Benkei, Senju y Takeomi. Entro al baño y vio estaba decorado con animales y uno que otro personaje de anime o manga.

Dejo su ropa en una canasta de color azul, eso solo lo dejaba para su ropa limpia. Fue a la llave y la abrió, sintió el agua fría después de poco a poco sintió el agua caliente, como a él le gustaba. La bañera estaba medio lleno, con un banco lo arrimo para tomar sus cosas se bajó con cuidado y lo dejo a una lado de la bañera, estaba listo para bañarse, se quitó su ropa y fue dejarlo a la canasta de color blanco, la ropa sucia.

- Hoy me bañare solo - Susurro y ladeo la cabeza y entro a la bañera, sintió el agua caliente.

Mientras afuera, Benkei entro a la habitación. Era el encargado de despertar al niño, pero al no verlo en su cama, se espanto. Lo busco abajo de la cama, tal vez era una idiotez. Pero una vez el niño se había cayó de la cama y había acabado debajo de la cama, ese día se había dado un gran susto.

Al ver que no estaba dejando de la cama, ni mucho menos en el armario, fue ahí al baño, al abrir la puerta vio al niño bañarse.

- Michi - Benkei asomó su cabeza, el niño se sobresalto y volteo a verlo.

- Be-ni - Takemichi sonrió - Me estoy bañando solito - el mayor sonrió.

- Bien, tu sigue con eso. Haré el desayuno - El niño asintió con su cabeza, cerro lentamente la puerta.

10 minutos después

Takemichi comía felizmente, senju, Takeomi y Benkei se miraron, normalmente el menor despertaba de mal humor. Pero ahora estaba feliz de ir a la escuela.

- ¿Por qué tan feliz, Michi? - Senju alzó una ceja y dejo su tenedor a un lado de un plato.

- Ayer hice un amigo - Takemichi tomo su vaso de leche de fresa.

- Eso es increíble - Takeomi y los demás sabían que Takemichi no tenía amigos de su edad por estar en la pandilla.

- ¡Sí! Estoy muy feliz - Takemichi siguió desayunando muy feliz. Los tres sonrieron, Takemichi ya no estría tan solo en la escuela.