O6. niño interior

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al verme en el espejo todo lo que encuentro es un monstruo. hay días en lo que me cuesta reaccionar que el olor podrido en realidad es mi alma y que a través de mis ojos ya no hay luz. no hay nada.

eran las cuatro de la madrugada de un lunes que prometía ser pesado. hacía una semana no dejaba de llover afuera, porque dentro mío la tormenta comenzó hace años. había tenido la mala suerte de haber ido a la escuela y ver la cara de todos. aunque en parte eso me parecía bien. me ayudaba a distraerme de todo lo que pasaba en casa. le conté muy por encima lo que había pasado a mis amigos y se sintió bien cuando me consolaron y me dijeron que iban a estar para lo que necesite. como ir a quedarme unos días en la casa de ellos o salir a pasear los fines de semana. llamadas o mensajes a cualquier hora y abrazos que me hacían sentir acompañado en este proceso.

el ruido de la lluvia no era tan malo. encontraba algo de paz en ella. me hacía feliz escuchar el ruido de las gotas caer sobre las chapas del techo o escuchar el viento chocar con los vidrios. me transportaba a los recuerdos casi borrosos de mi padre biológico antes de que nos abandonará. años más tardes, tenía pesadillas de el hombre alejándose de mi bajo una tormenta. nadie escuchaba al niño de cinco años rogar que por favor no lo dejara solo.

el problema no eran las lluvias leves, esas estaban bien. en realidad, el problema eran las tormentas, que sin importar cuanto tiempo pase, me seguían dando el mismo terror.

mamá se queda hasta tarde llorando y en la mañana se va muy temprano. esquiva mi mirada y mis abrazos. hay algo que aquel hombre se llevo y espero que solo sea un pedazo de su corazón. habían pasado casi nueve años juntos. aprendieron uno del otro y era parte de la familia. comprendo que mi mamá quiera estar sola, pero no quiero dejarla con la soledad. no quiero que ella se vaya también.

acostado en mi cama, tapado con miles de frazadas y bbama cuidándome de los seres malignos mientras está acostado en la punta de la cama, hizo darme cuenta que a veces las pesadillas eran necesarias para conocernos y darme cuenta que en realidad no estoy enojado con nadie por irse de mi vida. hay demasiada empatia en mí y no veo a adultos que toman decisiones malas que dañan a todos a su alrededor; veo en su interior a niños que buscan lo mejor para sanarse solos porque es la única forma en la que saben sobrevivir a este pesado mundo en el que les tocó estar.

a veces comprendo que mi padre biológico se haya ido. mi mamá me contó que cuando él era pequeño, al ser tantos hermanos en la casa, nadie le prestaba atención. entonces hacía lo que quería. desaparecía por muchos días y cuando volvía solo lo molian a golpes y lo castigaban. al no encontrar ningún lugar seguro en los seres que más amaba, volvía a desaparecer sin importar las consecuencias que eso podría traerle. encontró consuelo en las drogas y en el alcohol, dejando su sueño de ser futbolista al ver que nadie lo apoyaba y se burlaban de él. mi mamá una vez dijo que había que comprenderlo, porque él habia aprendido a huír de todo.

hay adultos que tuvieron padres horribles y deciden ser mejores que ellos, como mi mamá. pero hay otros que solo repiten la historia de sus padres, como mi padre biológico. estoy agradecido por los recuerdos felices y porque sé allá ido, no hubiese aguantado sufrir tanta violencia doméstica, pero no estoy agradecido por las cicatrices que dejo. tal vez nunca lo perdone por haberse ido sin dar explicaciones.

ahora la única forma de sobrevivir que encontré también es huyendo. alejándome de todos sin dar explicaciones y sin saber si voy a volver. esta bien si las personas no quieren estar conmigo después de que los abandone y vuelva como si nada hubiera pasado, los comprendo porque yo haría lo mismo.

⩩ excluido -  ꩜ han jisung ; stray kids auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora