El Mejor Fanático |NaruSasu

Entrevista

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Naruto

Siento algo extraño en mí cada vez que pienso en Tomatito, ya que solo puedo imaginarme a Sasuke.

¿Puedes enamorarte de una persona que nunca has visto?

La respuesta es sí, sé que es así.

Cada vez que hablo con Tomatito quisiera estar con él y no separarme jamás de su lado. No tengo idea de cómo es físicamente, pero, aun así, me gusta.

Me gusta cómo escribe, tan perfecto y, a veces, tímido. Sus historias siempre me han llegado, puesto que soy muy sensible y siento las emociones de los personajes como si lo estuviera pasando yo.

Y, en cuanto a Sasuke. . . No sé qué opinar con exactitud. Ante mis ojos, él es la persona más bonita en todo el mundo. No puedo evitar querer coquetear con él cada vez que lo veo.

Llegué al punto de creer que, en realidad, no necesito su ayuda para escribir la canción. Pero lo que necesito es a él.

¿Por qué? Simple, Sasuke me da inspiración.

Al verlo, todas mis ideas y sentimientos flotan en mi mente sin cesar, y él es el causante de ello.

No sé qué nombre ponerle a lo que estoy sintiendo por ambos. No logro entenderme por completo.

Solo sé que Sasuke me atrae y Tomatito me enamora.

Hoy es un día complicado. Tengo una entrevista en uno de esos programas de chismes de televisión y, aunque no quise hacerlo, mi representante me obligó.

Intenté alejarme de todo el medio de la televisión y lo que ella conlleva porque siempre hay rumores que pueden llegar a arruinar la imagen de uno. Además, ya es aburrido que casi todos los programas ganen dinero mientras hablan mal de otras personas.

No es mi onda.

Pero solo será una vez, eso dijo mi representante, Kakashi. Quizás sirva para atraer nuevos seguidores.

Estoy a punto de estar en el aire, visto mi jean negro, unas convers y una camisa azul. . . Que recién noto que no está correctamente planchada.

Qué más da.

Me acomodo en uno de los dos sillones frente a un muchacho de cabellos rojos, el periodista y conductor.

—¿Estás listo?—Me preguntó él con una sonrisa.

—Claro ttebayo.—En realidad me tiembla hasta el culo, pero claro que estoy listo.

Los nervios se apoderan de mí una vez que las luces provenientes del techo nos enfocan y Gaara, el periodista y conductor, toma el micrófono mientras ve una de las tantas cámaras.

—¡Buenas tardes, chismosos! Hoy estamos en un nuevo programa de Cuéntame otro chisme.

No me gusta ese nombre para un programa de televisión. . .