Unión

3K 329 164
                                    

.

.

.

Sasuke

He invitado a Naruto a comer junto a Itachi, aunque se auto-invitó. Yo se lo permití.

Guardé los papeles que se esparcían en la mesa con los que estudiaba. Agradezco aprender bastante rápido los temas y, gracias a ello, ya estoy casi listo para el examen de la semana que viene.

Naruto me ayudó con la preparación de la cena mientras que Itachi veía televisión. Maldito perezoso.

Fue muy gracioso y divertido cocinar junto a él, me ha hecho reír con puras tonterías.

Mientras mezclaba la salsa en la olla, se acercó a mí, abrazándome por atrás. Apoyó su mentón en mi hombro y sonreí.

—¿Quieres probar?—Le pregunté, refiriéndome a la salsa.

—¡Sí!—Abrió su boca.

Giré un poco mi rostro y tomé la salsa con la cuchara para llevarla a sus labios. El la tomó y saboreó, abriendo sus ojos con asombro.

—¡Me encanta!—Vociferó una vez que alejé la cuchara.

—¿No le falta nada?

—Mhm, no. Está perfecto.

Tapé la olla con la tapa y me di la  vuelta, chocando con la mesada. Posé mis manos detrás de su nuca y lo acerqué a mis labios para besarlo con fervor.

Jalé sus cabellos hacia un costado para darle una mejor apertura a sus labios e ingresé mi lengua en su cavidad bucal, succionado la suya con hambre.

Segundos después, me separé de él y pasé mi pulgar por su labio inferior, limpiando un hilo de saliva. Él alzó una ceja y sonrió de medio lado.

—Tienes razón, no le falta nada.—Reí ante su cara de petrificado.

—¡Me saboreaste!

—Sí, ¿y qué?

Él sonrió de forma amplia, achicando sus preciosos ojos y bajó levemente su cuerpo para rodear mi cintura con sus brazos. Rozó su nariz con la mía y comenzó a plantar pequeños besitos en mis labios.

Sigo creyendo que todo esto es un sueño, y que no tengo a mi ídolo besando mi rostro como si fuera un pequeño bebé. Pero no me quejo, para nada.

Cenamos con tranquilidad, entre risas y bromas. Itachi se llevó bastante bien con él, y me dio celos, a pesar de que el idiota tenga novio.

Ambos me elogiaron la cena y no fingí modestia puesto sí, estaba deliciosa. Siempre se me ha dado bastante bien la cocina.

Pasada la media noche y luego de tomar helado de postre mientras veíamos una película, Itachi se fue a su casa.

Me fui a dar un baño y, al regresar a la cocina en busca de Naruto, me lo encuentro lavando los platos, cubiertos y vasos.

Tiro la toalla con la que estaba secando mi cabello al sillón y me acerco a él, lo abrazo por la espalda y él se estremece.

—¡Jodido susto me has dado!

—¿Sabes que no es necesario que laves, verdad? Eres mi invitado. . .

—Mhh, no me importa ttebayo.—Comencé a dejar pequeños besos húmedos en su cuello trigueño, disgustando su sabor.

Él apaga el agua de la canilla y gira rápidamente hacia mí. En un abrir y cerrar de ojos, me tiene contra la encimera, viéndome a los ojos con fogosidad.

El Mejor Fanático |NaruSasuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora