Su cuerpo moviéndose al ritmo de la música era algo peligroso, para cualquier hombre que lo viese y el gran mafioso Kim SeokJin no era la excepción, ahí se encontraba babeando por la estrella de el lugar.
JinKook | SeokJin top; JungKook bottom
Menci...
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Habían pasado tres días y en esos días JungKook no se había presentado a trabajar, tenía muchos problemas, demasiados para él solo.
En esos tres días SeokJin había preguntado por él, pero no recibía una respuesta además de: "Tiene problemas personales".
Una noche de esas había pedido otro bailarín para un privado, pero no era lo mismo. Claro que no. Kim no tanto disfruto ver a otro chico.
Ahora sería el cuarto día, y esperaba que esta vez sí se presentara. Justo estaba por irse al club.
Los pensamientos de SeokJin eran invadidos por el bailarín, hasta que se vio interrumpido por uno de sus hombres.
--- Mi señor, ¿Me mandó a llamar?--- Preguntó el hombre pelinegro que al parecer había corrido, por lo agitado que se veía.
--- Sí, necesito que me hagas un favor--- Habló mientras se levantaba de la mesa del comedor--- Hay una compra pequeña de droga y quiero que la entregues--- Sacó un pequeño maletín donde estaba la droga y se la entregó, junto con un papel que contenía la dirección de entrega.
--- A la orden mi señor--- El pelinegro hizo una reverencia.
--- Cuídate.
--- Naturalmente señor--- Dijo el hombre sonriéndole a SeokJin.
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TaeHyung llegaba a la escena del crimen donde hace tres días encontraron muertos en 2 apartamentos de un edificio, claramente ya se había hecho revisión del lugar pero TaeHyung tenía ese don de investigar y estudiar demasiado las escenas. Además era un policía de alto rango.
Él solo llegó al edificio, ya en el quinto piso justo antes de entrar al departamento número diez se colocó un par de guantes látex, luego quitó la cinta amarilla y entró.
Comenzó a observar todo el lugar, los números de la predicción de los sucesos, las siluetas de los muertos dibujadas en el piso.
Cerró sus ojos recordando cómo estaban los cuerpos el día que sucedió, analizó la posición de las siluetas, y recordó que uno de ellos tenía golpes fuertes en la frente y un disparo en la cabeza por el lado de atrás, después fue al departamento trece donde se había encontrado otro cuerpo este último con 11 balas de USP en su cuerpo.
