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SeokJin secó su frente con una pequeña toallita de mano, mientras subía las escaleras del porche

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SeokJin secó su frente con una pequeña toallita de mano, mientras subía las escaleras del porche.

Miró la hora en su celular. Eran ya las 7:50 am. De seguro Jimin ya se había ido a trabajar.

La verdad es que ya tenía planeado levantarse temprano a trotar por la zona del bosque que ya conocía, pero aquella idea se hizo más realidad al despertarse y sentir aún el aroma a sexo en el aire.

Tenía pereza, pero decidió salir antes de que Jimin y Yoongi se levantaran, para no incomodarlos. Aunque estaba más que seguro que su amigo iba a estar muy avergonzado de todos modos.

Y es que la noche anterior si que había estado muy candente, por más de que trataron de ser silenciosos. Aunque SeokJin solo quería reírse y molestar a su amigo, el recordar los verdaderos sentimientos de Yoongi lo frenaban.

- ¡Hey Yoon! - Jin cerró la puerta - Buenos días.

- ¡Hola Jinnie! - gritó Yoongi desde la cocina, ya que estaba tomando una  leche con chocolate caliente. - ¿deseas desayunar?

Jin lo quedó viendo en silencio unos segundos, para después asentir sonriente. - Un café estaría bien, y...una tostada con queso crema.

- A la orden - rieron.

Jin observó detenidamente a Yoongi, quien se comenzó a movilizar en la cocina. Yoongi al parecer caminaba despacio y disimulaba su leve cojeo. Además tenía unos chupetones en el cuello, no tan profundos, pero se notaban. Suspiró mordiendo su labio inferior para evitar reírse.

Si Yoongi no quería hablar de aquello, por más que sabía que él escuchó todo, entonces él tampoco diría nada.

- ¿Te relajaste? - preguntó Yoongi, rompiendo el silencio. Jin se quitó el buso y se sentó frente al mesón.

- Si, mucho, la brisa del río a estas horas es como una terapia. - Jin se recostó en sus codos.

- Me alegro - Yoongi terminó de tostar el pan, y en unos segundos puso frente a Jin su desayuno. - Que disfrutes.

- Gracias Yoon.

- Por cierto, no se si ayer escuchaste...

- ¡No! - interrumpió - no escuche nada te lo juro.

Yoongi se quedó con los labios entre abiertos, y sus mejillas comenzaron a tomar un color rosado.

- Yo no, hablaba de... - rascó su nuca y miró a otro lado.

- Uh...uh... - Jin tomó de su café - continúa si.

- Me refería a que, si escuchaste lo que dijo Jimin sobre la parrillada de esta noche. - la voz de Yoongi era suave y baja.

Jin negó con la cabeza mientras terminaba de comer el pedazo de tostada en su boca.

- No, no escuche, pero, ¿hoy? ¿solo entre nosotros?

Quédate, aunque no me ames || JIMSUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora