Licantropía

56 𝗕𝗲𝗯𝗶𝗱𝗮𝘀

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ʳᵉᵐᵘˢ ˡᵘᵖⁱⁿ

El baile fue un completo caos, de eso estoy seguro, y sé que Kyara opina lo mismo. Sus ojos al verme con ella reflejaron lo que sus palabras no pudieron decir. Y estoy completamente arrepentido, pero, algo cambió desde esa noche.

Han pasado ya casi 5 semanas, y Kyla se ha tornado distante ¿Quién no lo habría hecho en sus zapatos? Pero, mi problema es que estoy tan enamorado de ella, que no puedo evitar sentirme como la peor persona del mundo.

Las palabras de mamá resuenan en mi mente cada día, y me siento una decepción al saber que no sigo sus consejos, que sé que están en lo cierto. A estas alturas, es imposible negar el amor y afecto que tengo hacia mi Kyara, y eso es algo que nunca dejará de existir. Sé que nuestros sentimientos son mutuos, y soy consciente de lo mucho que le he herido por no querer aceptarlos, es por eso, que después del baile me he decidido en cambiar todo.

Es momento de seguir a mi corazón y no a mis pensamientos.

—¿Escucharon acerca de la fiesta en la torre de Gryffindor? —comentan unos chicos de ravenclaw mientras caminan junto a nosotros sacándome de mi laguna mental.

—¿Fiesta? —cuestiono a nadie en particular.

—Mjum. Junto a James la planeamos hace un rato, al parecer los rumores se esparcen bien. —Responde Sirius.

—Últimamente hay fiestas bastante seguidas, y nunca son descubiertos. —niego con la cabeza.

—Lo dudo, yo diría que Dumbledore se hace de la vista gorda. —Se encoge de hombros James.

—No está bien chicos, irrumpen las reglas, y además, he oído que muchas personas llevan bebidas algo fuertes.

—Son geniales, junto a Kyla peleamos por quién aguanta más. —Ríe Sirius. —Detengo la caminata.

—¿Qué dijiste?

—Nada.

—¿Ustedes son parte de "esos"?

—No es nada Lunático, una simple bebida, lo juramos.

—Debo ir a estudiar, hablamos luego. —Retrocedo sobre mis pasos hacia el árbol junto al lago para leer un rato.

Todo está en completo silencio, solo mis pasos y las hojas de los árboles cayendo al suelo hacen ruido alguno. Kyla al oír esto levanta su mirada hacia la mía, quedándose así un breve momento hasta voltear para el lado contrario. Me acerco a ella rápidamente.

—Hola Kyla.

—Hey.

—¿Interrumpo algo?

—De hecho...ya me iba, tengo cosas que hacer. Nos vemos luego, Lunático. —Se levanta rápidamente hacia el castillo sin dejarme siquiera decir algo.

Procedo a fruncir mi entrecejo y empezar la lectura un poco más exasperado que antes.

Kyara literalmente huyó de mí.