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— Es la cuarta vez que amanezco contigo en la misma cama esta semana. — Dijo Kai sintiendo los brazos de Soobin en su cintura. — Sé que estás despierto.

— Entonces cállate.

El omega bufó y trató de levantarse, digo trató por que Soobin no lo soltó.

— Nene no te vayas. — Murmuró con su voz adormilado y aún con las manos en la cintura del Rubio.

Kai bufó nuevamente y se volvió a recostar junto a Soobin, quien sonrió sin mostrar sus dientes por haber logrado lo que quería.

— ¿Cuando veremos lo de Kim? Esa mujer a recorrido medio mundo con tal de que no la encuentres. — Soobin suspiró queriendo solo dormir un rato más junto a él sin tener que saber del trabajo.

Pero al parecer Kai tenía ganas de no dejarlo dormir.

— No lo sé, pero de que morirá lo hará. Ahora, cállate y déjame dormir ¿Si? — Soobin besó su mejilla y volvió a cerrar sus ojos tratando de dormir.

Kai mordió su labio sin saber que decir, quería levantarse e ir a comer algo pero Soobin no tenía ningún ánimo de querer soltarlo.

— Soobin. — Pronunció mientras jugaba con sus dedos y temiendo de que el peli-azul le dijera que se callara otra vez.

— ¿Mh?

— ¿Podemos comer algo? — El alfa asintió. — ¿Me dejas levantarme? — Soobin negó.

— Lindo, no podrás escapar de mí, tus intentos son en vano. — Kai maldijo por lo bajo. — ¿Por qué te quieres ir? Es muy temprano.

— Por que aún tengo que ver los papeles que te recuerdo que me los pediste para hoy a la noche y si quiero tener dinero necesito ir a trabajar, no quiero que me pagues por follar contigo.

— Te puedo pagar por eso si quieres. — Kai le dio un golpe en el brazo. — No seas violento.

— Deja levantarme Choi.

— Al menos bañemonos juntos.

Kai terminó por aceptar con tal de que Soobin lo dejara salir de la cama, cuando vio que este estaba distraído trato de salir por la puerta pero solo chocó con la sirvienta.

— Señor Huening. — Dijo la chica sorprendida al verlo en la habitación de su jefe.

— Tú no has visto nada, dices algo y te vuelo la cabeza. — La chica asintió algo asustada.

— Y-yo solo les traía el desayuno, no lo vi venir, lo lamento mucho señor Huening. — Kai le hizo un gesto de que no se preocupara, la chica dejó todo en la mesita de noche e hizo una reverencia retirándose de ahí.

Cuando la puerta se cerró Soobin se agachó quedando a la altura de Kai, quien aún estaba en el suelo.
— Una pena que tú plan falló. — Hizo un falso puchero. — Ven, vamos a bañarnos.

El peli-azul lo tomó entre sus brazos al estilo princesa y lo llevó hasta la ducha, Kai aún con cara de frustración de que su plan no saliera como el quiso, dejó que Soobin le quitara toda la ropa y lo ayudara a meterse a la tina cuando esta ya estaba lista.

— Si sigues mirándome así te ahogare aquí mismo y no precisamente con el agua.

Soobin esparció el shampoo con olor a frutas en su cabello haciendo que la espuma se formara poco a poco y  comenzara a hacerle figuras en el pelo.

— Te vez muy bonito. — Soobin sonrió. — Creo que así me gustas más.

— Eres demasiado tierno como para ser el hombre más temido de corea ¿No crees? — Preguntó Kai mientras miraba como el alfa seguía con las manos en su cabeza. — Me gusta cuando te comportas así.

— Bueno, si tanto te gusta no lo arruines.

Kai le lanzó un poco de agua al rostro con una sonrisa malévola, Soobin limpió su rostro con la toalla a su lado y se paró siendo cuidadoso de no caerse. Dejando su miembro prácticamente en la cara de Kai, quien tragó grueso y miró hacía otro lado.

— Joder Choi, no puedes pararte y poner tú pene en mi cara. — Reclamó.

— No es primera vez que lo tienes ahí.

— Eres un idiota.

Soobin nuevamente rió y lo ayudó a pararse tratando de que no se cayera, en cuento lo tuvo enfrente lo besó. Un beso profundo y que de alguna manera le dio paz al omega. Mientras que Soobin descaradamente bajó su mano y apretó una de sus nalgas provocando que el más bajo gimiera en medio del beso.

— Tenemos que trabajar Choi, deja de hacerte el tonto. — Le dijo el omega en cuanto se separaron del beso. — Además mi cuerpo está entumecido.

— Está bien.

Y sin ninguna intención de por medio, se bañaron juntos, Kai lavando el cabello de Soobin y viceversa.

De lejos si parecían una pareja, que se amaban como ninguna otra. Pero al menos Kai solo veía sexo entre ellos dos, sin ningún compromiso o sentimiento de por medio. Mientras que Soobin aún no tenía claros sus sentimientos hacía el omega, no sabía si le atraía, si solo quería acostarse con el o si le gustaba.

Ninguno sabía que era lo que quería con el otro, pero lo que si tenían claro era que ambos se atraían sexualmente, Kai era fan de como Soobin lo besaba, lo tocaba y lo complacía a su gusto, por lo mismo no había vuelto a acostarse con algún otro alfa.

Antes de Soobin todos eran mejores, después todos eran peores.

𝙈𝙖𝙛𝙞𝙖 𝙗𝙤𝙨𝙨||ˢᵒᵒᵏᵃⁱWhere stories live. Discover now