Electric Boy -au km 益

Capitulo 70

La mentira tiene infinidad de combinaciones pero la verdad sólo tiene un modo de ser.

A veces creemos que nuestras acciones no tienen repercusiones cuando cometemos errores. Solemos cegarnos por cosas tan banales que nos alejamos del objetivo general; vivir la vida sin complicaciones.

Sentimos que actuamos de manera correcta cuando tenemos claro lo que queremos, pero no siempre se toma el camino adecuado para llegar a ello. Lastimamos a terceros con decisiones individuales cuando solo se piensa en uno mismo, a veces sin intensiones de querer hacerlo.

¿Pero no es parte de la vida cometer errores y aprender de ellos?

La verdad puede ser demasiado subjetiva, todo depende de la perspectiva que la veas. Pero no aplica en casos similares a este. La verdad es lo que es, lo que ya sabemos e intuíamos pero que necesitamos escuchar con palabras llenas de sinceridad.

Jimin sabía que las cosas con Jungkook cambiaron para mal, lastimosamente solo para uno estaba resultando un buen comienzo. Él ahora estaba tratando de ser feliz con alguien. Después de estar mucho tiempo bajo la sombra del desconsuelo, de estar tras una persona que no merecía un mínimo de su cariño, que no apreció y respetó nunca la amistad que habían tenido desde pequeños. Que lo manipulaba a su antojo para salir beneficiado de cosas que se obligaba a hacer por él. ¿Por qué ahora debería importarle lo que pasara con una amistad que ya estaba más que rota?

Jimin ya se había cansado de sufrir por alguien más. Se había cansado de poner la comodidad de las personas antes que la suya. No importaba cuantas veces suplicara a solas por un poco de su compasión, porque su corazón ya no soportaba tanto dolor. Tampoco lo hacía cuantas lagrimas derramara al día, ninguna de ellas resolvería la trágica vida de Jimin. Se dio cuenta demasiado tarde de cuan usado fue, utilizado por la persona que amaba más que así mismo.

Ahora ya no tenía por qué tener compasión con la persona que nunca le dio tregua a su roto corazón.

Su mirada pasó de los jueces hacia el escenario cuando las luces apuntaron en el medio. Entonces su corazón latió en su interior como una ráfaga de viento tratando de llevarse su dolor. No prestó atención a nada más cuando observó a Jungkook subir al escenario, su al rededor desapareció con cada pestañeo y sus sentidos se sintieron sensibles de repente.

¿Por qué el cuerpo del contrario se sentía tan cerca y lejos a la vez?

Añoraba estar con él. Claro que lo hacía. Pero que lo extrañara no significaba que debía hacer algo al respecto, esta vez ya no.

Prefería quedarse al margen con sus sentimientos aún recientes luego de tratar  suprimirlos tantos años. No era bueno hacerlo, guardarse todo y tragarse los dolorosos nudos que permanecían casi diariamente en su garganta. Pero Jimin bajo presión actuaba y tomaba soluciones precipitadas como cualquier humano, y en su momento aquella idea fue demasiado buena. Ahora ya no lo veía así, su mente y su cabeza ya estaban claros, podía ver hacia atrás y señalar sin la pena carcomiendo su conciencia cada uno de los errores que cometió. ¿Pero cómo se lo hacía entender a su pobre corazón?

Que no todo lo que tuvo que soportar era su culpa. Que a pesar de que él decidió sufrir por decisión propia a su lado, Jungkook tampoco era culpable del todo.

¿Cómo iba a saber lo que sentía Jimin?

Él solo se enamoró y vivió bajo la sombra de ese amor no correspondido. En sus manos estaba la decisión de parar todo, tenía poder sobre si mismo y sus acciones. Pero ese sentimiento era tan deslumbrante al principio que no pudo rechazarlo, le sedaba todo razonamiento lógico y hacia dormir a la coherencia en lo más profundo de su cabeza. Por mucho que luchara contra ello una cuerda imaginaria lo hacia regresar los pasos.