⌊Sᴀᴅɴᴇss⌉ •YoonMin•

⇢𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰³

Tres años atrás...

De un momento para el otro Jimin pudo notar como las cosas cambiaban, Yoongi de repente volvió a aparecer en sus vidas, con un regreso algo raro, quitando el hecho que fueron semanas enteras sin verlo, al fin y al cabo se encontraba presente, por lo que decidió no presionar con el tema del beso, no hasta al menos ver a su Hyung más tranquilo, porque había que admitir que se encontraba inquieto.

Las reuniones entre los seis fue normal, todos se reían, todos volvían a convivir juntos, eso si, Yoongi había explicado que dejo el club de música porque no tenia tiempo para el estudio, lo cual calmo un poco los pensamientos negativos del rubio, quien no sabia que aquello era un completa mentira.

Eso si, cada vez que pedía verse a solas para ir al cine o juntarse en su casa, el mayor siempre contestaba que estaba ocupado, y aunque le doliera, Jimin terminaba creyéndole rotundamente.

Pasaron los días y pudo notar que su Hyung se juntaba más con Jungkook, pero no le molestaba, son amigos después de todo, además, con Taehyung siempre se la pasaban ensayando para entrar a la academia prestigiosa de baile con la que tanto habían soñado.

Sin embargo, no había día que no pensara en Yoongi, en como le confesaría sus sentimientos ahora que la marea bajo, aunque eso era lo que pensaba, ya que sus esperanzas volvieron cuando el mayor explico el porque ese día, como el resto de los días, había ignorado a todos y algo dentro de el se alegro de saber que el no era el verdadero problema.

Aunque si lo era.

Salió de las practicas con Taehyung a su lado, ambos con un montón de chicos, rindiendo el examen, retirándose por las grandes puertas, hasta que recibieron el mensaje de Yoongi en el chat del grupo que tenían, donde les pedía por favor que salieran a cenar esa noche.

－¿Que crees que sea?－ pregunto entre extrañado y entusiasmado, nunca antes Yoongi les pidió juntarse, normalmente otro del grupo tomaba esa iniciativa.

－Capaz tuvo un día bueno y quiere festejarlo con nosotros－ despreocupado, el pelinegro guardo lo ultimo que le quedaba en la mochila, para luego sacar dos manzanas y entregarle una －¿ya paso la dirección?...

－Si－ abrió el Google maps y rápidamente reconoció el lugar a donde debían ir －vamos en metro, te prometo que pronto me comprare un auto, ahora solo debemos movernos por otros medios－ codeo a su amigo, quien dejo salir una risa.

－No es por presionarte Jimin, pero odio el metro, me parece asqueroso y un auto nos vendría bien－ respondió caminado por las calles oscuras de Seúl －vamos antes de que me arrepienta y pida un taxi...

Ambos empezaron a caminar, notando que varios compañeros de danza iban hacia su misma dirección, siendo común que todos tomaran el metro, por lo que no se hacia nada raro el que vayan por el mismo camino.

Entre bromas y un par de risas, Jimin y Taehyung con suerte consiguieron asientos una vez tomaron el metro, por lo tanto se acomodaron uno al lado de otro, apoyando una cabeza sobre el hombro de uno y la otra cabeza sobre la otra.

－¿Crees ver a Yoongi más relajado?...

－Mmm... se lo ve diferente, si, ¿por qué?－ respondió el pelinegro jugando con la manito de su mejor amigo mientras el tren los llevaba a su destino.

－¿Debería al fin hablar con el?, digo... ¿debería confesarle lo que siento?－ pregunto al fin, sintiéndose muy indeciso.

－Deberías, si－ afirmo el contrario, sabia lo duro que estaba siendo esto para su amigo, pero debia animarlo siempre a intentarlo －aprovechando que se viene las vacaciones, Yoongi Hyung tendrá más tiempo libre, entonces será tu momento para confesarte...