Capítulo IV

15 7 0
                                    

Capítulo IV: Un lugar seguro.

Finalmente habíamos encontrado un lugar seguro. O al menos eso parecía, solo llegamos a un puente donde estaba estancado de tráfico. A lo lejos se veía personas bajándose de sus autos, camionetas,  entrando en desesperación por querer salir de ese lugar, hasta llegar al punto donde lo único que se obtiene es la violencia. Parecía que las autoridades no tenían el control de eso. Solo tomaron un micrófono para alzar la voz.

—¡Tranquilícense!. Todo va salir bien. Estense quietos. Si cruzan a más, tendremos que usar armas de fuego.

Solo tome la radio para poder comunicarme hacía el otro vehículo donde estaban los demás. —¿Están bien?. ¿Dónde iremos ahora?.

Desde el otro vehículo Meli  tomo la radio. —¿Dónde deberíamos ir ahora?.

El tráfico seguía y seguía. Algunas personas se salieron de los vehículos para mirar hacia atrás de la fila de los vehículos: De manera lenta me salí del vehículo, mirando hacía la misma dirección. Cómo las personas corrían hasta donde estábamos nosotros, empujándome. No le tome demasiada importancia, me subí en el  techo del vehículo para ver aún mejor. Los oficiales empujaban a algunas personas, pero ellos se seguían levantando para atacar nuevamente. Pero uno de ellos, comenzó a morder el cuello de aquel oficial. De manera rápida me baje del techo del vehículo para entrar en el auto. Tomando de manera rápida la radio.

—Parece que tendremos compañía. —Susurre.

—¿Compañía?. —Se cuestionó Tania.

Varias personas comenzaron a correr hacía dónde estábamos nosotros, manchando las ventanas con sus sucias manos llenas de sangre. Corrían todo recto hasta llegar al puente. La autoridad  cumplió con lo que había dicho anteriormente, comenzaron a disparar hacía aquellas personas. Pero cuando disparaban en alguna parte de su cuerpo, caían y se volvían a levantar. Hasta que con sus franco tiradores apuntaron a sus cabezas. Yo tenía cargando el teléfono con un cargador que encontré en el vehículo, mirando que tenía 60%. Solo lo tome demasiado preocupado llamando a un número, pero al momento de llamar se cortaba la línea. Lo intentaba una y otra vez, pero no sé podía entrar a una llamada.

—¡Demonios!. ¿Qué es lo que pasa realmente?.

Solo di un profundo suspiro, mirando como mi WhatsApp y mis mensajes estaban llenos. Noticias por todos lados: Grupos en cuáles ni entre y los mensajes de familias. Mandaron un vídeo, lo cual había una chica bastante alterada. Hablando como si fuera una excursión.

—¿Recuerdan que hace un par de meses habían dicho que clausuraron el aeropuerto por terroristas?. Y todos creímos eso, porque el avión se estrelló... Pero la verdad... Es que hay personas con cuerpos en putrefacción, caminando de un lado para otro... Como si fueran...

Solo apague la pantalla del teléfono, dando un pequeño susurro. Dejándolo cargar nuevamente. —Zombies ...

Las personas que aún se encontraban dentro de sus vehículos salieron rápido entre la tensión de nervios y pánico empezaron a correr hacia al frente dónde estaban las autoridades. No pensaron en lo que podría pasar, así que comenzaron a ser heridos. Todos nosotros, desviamos la mirada evitando ver aquella masacre. Los disparos atraían a algunas personas desde atrás, pero no les importaban con tal de estar hacía adelante. La gente, eran totalmente diferentes a las otras. Se levantaban del piso empezando a deambular persiguiendo a la gente viva, escupiendo un líquido totalmente rojo. Se notaba que era sangre, estábamos en medio de la carretera, en un tráfico eterno. De manera rápida tome la radio para llamar hacia el otro vehículo, dónde se encontraba Tania y Meli.

Silly World: The BeginningDonde viven las historias. Descúbrelo ahora