Tutor Científico [Dr. Stone × Go-toubun no Hanayome]

Capítulo 4: Día libre y fuegos artificiales (parte I)

Era una mañana tranquila, en un departamento se veía a un adolescente con el pelo muy parecido a un cebollín. Era Senku Ishigami, un joven amante de la ciencia muy inteligente

Se encontraba su escritorio realizando diseños de su máquina y viendo imágenes de referencia en su computadora, ya tenía varias ideas y bocetos pero ninguno le convencía. Aveces realizar algo desde cero es bastante difícil, incluso a las mentes más brillantes se les complica las cosas

Era un domingo y ya había realizado todas las tareas pendientes que tenía así que aprovecharía este día para adelantar algo de su máquina

Senku: ya tengo diseñado la máquina, me falta unos detalles por pulir pero voy a buen camino. El problema ahora es encontrar una buena fuente de poder para que no consuma tanta energía y se sobre caliente  —pensó el científico— debería ver en internet si encuentro algo

El joven científico estaría a punto de realizar su búsqueda por internet, pero como siempre existe "algo" o más bien "alguien" que le impedirá esto

Taiju: ¡¡SENKU, YA TRAJE LO QUE ME PEDISTE!! —exclamó pasando por la puerta de golpe asustado al científico—

Era Taiju Oki, el mejor amigo de Senku. Este último le había pedido que le trajera unas piezas para su máquina y el como bien amigo que es lo hizo sin ningún problema

Al no ser muy inteligente no ayuda mucho a Senku en la realización de sus inventos, por eso le ayuda relacionado a todo lo que sea con fuerza. Cómo sería comprar piezas y herramientas o transportar sus máquinas por lo pesadas que son

Eso los hacían un buen equipo, ciencia y fuerza trabajando juntos

Senku: ¿Cuántas veces tengo que decirte que no entres gritando así de la nada? —preguntó enojado mientras miraba a su amigo desde la silla de su escritorio—

Taiju: perdón Senku, es la costumbre —dijo apenado—

Senku: pues que mala costumbre tienes. Y bueno ¿Pudiste conseguir todo?

Taiju: así es, pude conseguir todas las piesas que necesitabas —abriendo un bolso con todas las cosas—

Senku: muchas gracias grandulón, esto me servirá mucho para la máquina

Taiju: ¿Todavía sigues con esa máquina que convertía el plástico en gasolina? —preguntó—

Senku: así es, desde el incidente de la explosión tuve que crear otro diseño para la máquina. Está vez voy a hacer que funcione —afirmó con determinación a su amigo—

Taiju: ¿Y que pasará con el cohete? ¿Lo dejaras de lado?

Senku: claro que no, sigue en pie el crear ese cohete. Prometí que iría al espacio de alguna u otra forma

Taiju: ya has hecho muchos cohetes en el pasado que lamentablemente no funcionaron ¡Pero esta vez confío en que puedes lograrlo, Senku! —exclamó determinado a su mejor amigo—

Senku: me alegra saber que cuento con tu apoyo grandulón, como sea ¿Quieres ayudarme con esto? —señalando a las piesas de la máquina—

Taiju: ¡Por su puesto! ¿Pero en qué ayudo? No soy un cerebrito de la ciencia como tú

Senku: no te preocupes, yo me encargo de lo demás. Solo pásame las herramientas cuando las necesite

Taiju: ¡Está bien, daré mi mayor esfuerzo! —exclamó eufórico—

Senku: bueno, empecemos

Senku y Taiju empezaron a armar la máquina y como dijo el científico, el peli marrón ayudaba pasando las herramientas y piesas al científico mientras que este armaba y soldaba las piesas de su máquina