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Obi-Wan había estado disfrutando de un raro momento de tranquilidad a bordo del Negociador. La 212ª y la 501ª habían terminado su reciente campaña y estaban a punto de regresar a Coruscant. Obi-Wan estaba deseando volver con calma al templo, y pasar algún tiempo en su propia nave sin batallas y sin distraer a la antigua padawan. La Fuerza, al parecer, tenía otras ideas.
El Consejo había recibido un informe de uno de sus espías de que el Conde Dooku estaba buscando un artefacto en particular. Un holocrón que se rumoreaba que estaba en un antiguo templo Jedi en un planeta boscoso. Resulta que un planeta que coincidía con esa descripción estaba a pocas horas de viaje de Obi-Wan y Anakin.
—Lo hemos reducido a tres planetas —dijo el maestro Yoda.
—¿Y quieres que la 501 y la 212 lo comprueben? —preguntó Anakin, con su holograma parpadeando junto a los demás.
—Sólo tú y el maestro Kenobi, Skywalker —dijo Mace Windu—. Tu padawan y el almirante Yularen pueden encargarse del mando durante unas horas.
—Mis hombres estaban deseando pasar un tiempo en casa.
Mace le lanzó una mirada severa.
—Y lo tendrán. Pero estamos en guerra, y creo que todos estamos de acuerdo en que evitar que el Conde Dooku consiga un holocrón potencialmente peligroso es más importante.
Anakin frunció los labios, pero asintió secamente.
—Anakin y yo podemos encargarnos, Maestros —dijo Obi-Wan.
Anakin y Ahsoka cortaron su alimentación y Obi-Wan se movió para hacer lo mismo.
—Un momento, Obi-Wan —dijo Mace de repente—. Queríamos advertirte de unos rumores preocupantes.
—¿Preocupantes cómo?
—Hemos capturado a un terrorista, un Moralo Eval. Estaba involucrado en un complot para secuestrar al canciller.
Obi-Wan levantó una ceja.
—Menos mal que lo hayan capturado entonces.
—Tenemos razones para creer que su captura podría no ser el final. Hablaremos más cuando vuelvas, pero estate especialmente atento. —Mace hizo una pausa—. No queríamos mencionar nada con Skywalker en la llamada. Ya sabes cómo es él cuando se trata del canciller.
Un músculo de la mandíbula de Obi-Wan se crispó. Así es.
—Sabia elección, maestro Windu. Tendré más cuidado.
—Como he dicho, pronto hablaremos más. —Mace frunció el ceño—. Tenemos... una idea. No es buena, pero nuestras opciones son limitadas.
—Percibo mucha agitación, Obi-Wan. Debes ser precavido. —El Maestro Yoda hizo una pausa significativa—. Esto podría ser un punto de inflexión.
