Draco Malfoy y el Príncipe Oscuro Harry Potter

Capítulo único

Antes que todo me gustaría que si hay un error, por favor me lo digan para corregir.

Me gustaría aclarar que esto no lo escribí yo, solo lo traduzco, el fic es de una cuenta orfana (orphan_account).
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"El futuro de la familia está en tus manos Draco. Es cierto que me molestaba que fueras un sumiso, pero ahora lo veo como lo mejor que podría haber pasado. Mi precioso niño, algún día serás consorte de Harry Potter. Estoy seguro de eso." Lucius Malfoy se arrodilló frente a su hijo, su mano en su hombro y una orgullosa sonrisa en su rostro.

"¿Como podría ser yo el consorte de Harry, padre? Realmente nunca he hablado con él." Draco respondió. Él y Harry acababan de terminar su primer año en Hogwarts y habían sido clasificados en diferentes casas, por lo que sus interacciones eran limitadas.

"Durante el verano voy a enseñarte cómo comportarte, para que llames la atención del heredero Potter y asegures tu matrimonio con el en el proceso. Debemos actuar rápidamente. No tengo ninguna duda de que las otras familias de alta están planeando algo similar."

Draco miró tímidamente a sus pies.

"¡Eso es bueno!" Su padre lo elogió: "Los dominantes aman la mansedumbre. Eres natural."

"¿De verdad crees que podría gustarle?" Pregunto Draco suavemente.

"Él estará locamente enamorado de ti. Tienes el mejor pedigrí disponible. También eres muy guapo, lo que no sorprende en lo más mínimo. No hay forma de que mire más allá de ti.

Draco se iluminó. Le encantaba la idea de ser consorte del mago más poderoso del mundo, y estaba seguro de que algún día sería Harry, quien es la misma imagen de su señor padre.

Las lecciones de Draco comenzaron rápidamente ya que solo tenían un verano antes de que se reanudarán las clases. Lucius eligió entrenar al niño él mismo en lugar de contratar ayuda. No quería que se supiera que estaba entrenando al niño antes de que llegara a la pubertad.

"Golpear duro, golpea primero." Lucius pensó para si mismo. Y la Victoria será nuestra.

Todos sabían quién era Harry Potter. Era inconfundible.

Mientras caminaba por los pasillos de la escuela, lo saludaban con reverencias, y donde quiera que estuviera, lo adulaban y lo adoraban.

Eso no lo echo a perder. Tenía un comportamiento amistoso y una sonrisa encantadora. Todos estaban seguros de que algún día sería como su padre.

Draco lo había observado desde lejos pero nunca se había acercado. Su propio padre había servido como cortesano durante muchos años, pero nunca trajeron a Draco. Quería esconder al niño, que sería su arma secreta.

"Ahora recuerda, Draco, cuando te acerques a él, actúa como si no te importara su atención. Pasa, cierra los ojos y sigue caminando. Se sorprenderá tanto que serás todo lo que vea. Esta acostumbrado a que lo miren, por lo que debes hacerlo brevemente. ¡Pero has que el momento cuente!

Las palabras de su padre resonaron en su mente cuando entró en Defensa contra las Artes Oscuras. Harry estaba sentado en la parte de atrás con un grupo de personas rodeándolo, como de costumbre. Ron y Hermione siempre estuvieron a su lado. El dominante Weasley de sangre pura que había sido su mejor amigo desde la infancia, y su hermana pequeña, que era lo suficientemente inteligente para saltarse un grado, eran sus compañeros constantes mientras los demás iban y venían.

Draco comenzó a caminar, buscando un asiento al frente que estuviera en la línea de visión de Harry, pero lo suficiente lejos para que no pudieran hablar.