¹☂︎ 𝐂𝐎𝐍𝐄𝐂𝐓𝐀𝐃𝐎𝐒. ☂︎ [𝑭𝒊𝒗𝒆 𝒀 𝑻𝒖́.]

Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ Dɪᴇᴄɪɴᴜᴇᴠᴇ.

T/ɴ Pᴏᴠ's:

Y sucedió...
Lo que tanto he deseado, por fin sucedió.

La noche de ayer, Five me pidió ser su novia, o mejor dicho, su chica, con unas palabras increíblemente lindas. Y claramente yo le dije que sí.

Flashback:

–Desde que comenzamos a pasar tiempo junto, me he sentido muy cómodo contigo; Más de lo normal.
Sé que es algo un tanto extraño, pero... En verdad me gustas, y si me lo permites, me encantaría pasar gran parte de mi vida contigo. Por ti, cariño; Soy capaz de bajarte las estrellas, sí así lo deseas...

Fin del Flashback.

¿Cómo me voy a negar a una declaración tan hermosa? Eso es imposible.

Ahora mismo, estamos en mi habitación. Yo desperté hace un rato, pero él sigue dormido.

Tal vez creerá que soy una acosadora, por mirarlo dormir, pero es imposible no mirarlo. Es muy lindo y tierno.
Su cabello ligeramente desordenado, sus largas pestaña, y ni hablar de los lindos lunares que tiene en el rostro.

Sonreí ligeramente, acariciando delicadamente su mejilla, alejando el cabello de su rostro.

–¿Tan bello soy? -lo escuché murmurar adormilado.

Me asusté un poco al escucharlo hablar, pero solo reí por lo bajo.

–Sí, eres perfecto... -respondí, dejando un beso sobre su nariz.

Arrugó ligeramente su nariz, por lo cual, volví a reír por su acción.
Abrió un poco sus ojos, dejándome ver ese hermoso color verde, que tanto me encanta.

–¿Dormiste bien? -pregunté, acariciando su mejilla.

Asintió ligeramente, frotando sus ojos. –Sí, ¿y tú?

–Sí, también. -respondí, asintiendo.

Dirigí mis vista hacía el reloj que tengo en mi mesa de noche, notando que ya casi era hora de desayunar.

–Five, ya debemos bajar. -dije dirigiendo mi mirada hacia él.

Murmuró algo, estirándose un poco. –Está bien, ya voy... -se levantó de la cama, quedando sentado sobre ésta, mirando a la nada.

Reí ligeramente, acercándome a él, para dejar un beso en su mejilla. –¿Aún tienes sueño?

–Realmente, sí... -respondió, riendo por lo bajo. –Iré a ducharme, ¿Te veo en el desayuno? ‐preguntó, y yo asentí.

–Sí, te veo abajo.

Él sonrió ligeramente, y dejó un beso en mis labios, el cual, no tardé en corresponder. Al separarnos, volvió a sonreír, y simplemente desapareció.

Sonreí con emoción, dirigiéndome a mi baño. Me dí una ducha, coloqué mi uniforme y cepillé mi cabello, al igual que mis dientes. Al estar lista, me dirigí a abajo.

En el comedor, se encontraban todos, a  excepción de Five y papá. Suspiré, dirigiéndome a mi lugar.

Sentí que alguien tiró de mi brazo, provocando que cayera al suelo.

–Carajo... -me quejé, levantándome del suelo.

Levanté mi mirada, encontrándome con Diego, el cual, había provocado mi caída, ya que tenía una sonrisa burlona en su rostro.

–¿Ahora ni siquiera caminar sabes, Número Ocho?

–Cierra la boca, Diego. -respondí, sacuendo mi uniforme.