Capitulo 22

173 6 0
                                    

Capítulo 22

—¿si dígame?
—hola mamá , soy yo
—Cepeda hijo ¿pasa algo? ¿Porque me llamas tan temprano?
—todo está bien mama no te preocupes, pero si me gustaría decirte una cosa
—dime ¿de que se trata?
—bueno la verdad es que es muy largo pero el resumen es que conocí a una persona muy especial aquí y me gustaría quedarme una semana más con ella , mamá ella me necesita y yo a ella y quiero quedarme una semana más con ella
—¿y donde te vas a quedarte?
—en su casa, sus padres me han acogido muy bien y me siento genial con ellos , un día deberías conocerles son encantadores, pero me gusta hablaros de ellos más en detalle cuando vaya a casa sabéis que no soy de contar las cosas por teléfono ni por mensaje
—lo sabemos cielo, entonces ¿te quedas una semana más en Barcelona?
—si , bueno o eso espero tengo que hablar con el jefe de la empresa y ver si puedo cambiar los billetes de avión
— vale, si esa persona te hace tan feliz puedes quedarte con ella pero nos la tienes que presentar ¡a ver si vamos a ser abuelos y no nos vamos a enterar!

Mi madre era una bromista le encantaba hacer bromas como a mi , siempre sabía sacar la mejor parte de las cosas

—¡mamá! -me sonroje al oír sus palabras
— ¿que? Es verdad Cepeda no quiero ser abuela sin conocer a la afortunada madre de la criatura y seguro que tu padre tampoco
—mamá no somos nada de momento, y ni mucho menos hemos pensado en tener un hijo soy muy joven y ella más , es una cría como para pensar en eso y yo tampoco quiero pensar en ello
—vale cariño , sabes que era una broma pero quiero verlos antes de morirme eh
—no digas eso mamá por dios
—si estoy ya mayor hijo
—bueno lo que tu digas , yo te veo estupendamente
—anda te dejo cariño que voy a desayunar y prepárame para ir a trabajar
—vale , gracias por todo mamá , te quiero
—y yo a ti hijo , pórtate bien

Colgué y suspire aliviado , mi madre había aceptado que me quedase una semana más y ahora venía la parte más difícil convencer al jefe de la empresa. Reuní las fuerzas suficientes para hacerlo y marque su número de teléfono que tenía apuntado en la agenda del teléfono. Tres tonos de llamada sonaron hasta que respondió desde la otra línea de teléfono en la que se encontraba el.

Aitana

Me desperté con el sol dándome en la cara y me estiré, abrí los ojos del todo y no estaba Cepeda en la habitación, pensé que estaría en el lavabo o en la cocina desayunando o eso quería pensar, me puse las lentillas y me fui al baño a peinarme el flequillo. Después fui a la cocina pero tampoco estaba Luis y me preocupé bastante así que decidí preguntar a mi madre

—¿mamá donde está Cepeda?
—buenos días primero ¿no?

Mi madre se rio y le di los buenos días y después me respondió

—tenía que llamar a su madre por un asunto familiar, está en la terraza, pero no le interrumpas se buena y espera a que acabe sentada en el sofá
—si mamá , iba a hacerlo de todas formas no me gusta molestar ni invadir su espacio personal
—mientras os estoy haciendo el desayuno
—gracias mamá

Fui al sillón a esperar a que luis acabase de hablar por teléfono y cuando acabo de hablar se quedó un rato mirando algo en el móvil, guardo el móvil y me vio y salió corriendo de la terraza para darme un abrazo

Cepeda

La llamada fue todo un éxito , le conté que me había surgido un imprevisto importante y no podría irme a Galicia esta semana y me comprendió perfectamente y me dijo que sin problemas, espero que después de todo esto me aceptaran como un trabajador en aquella empresa de diseño industrial. Después estuve buscando un plan para hacer con Aitana y vi que a una hora de aquí había un pequeño rio para pasar el día así que le propondría a Cosme si me dejaba su coche ya que hace un par de años me saque el carnet y podríamos ir sin problema. Salí de la terraza y ahí estaba aitana esperándome , ya se había despertado la bella durmiente, abrí la puerta de la terraza y fui a abrazarla

Una canción y una rosa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora