29.

1.7K 59 0
                                    

El sol casi salía pero nosotros no nos preocupamos, nos estábamos besando mientras yo daba saltos sobre el, mi gemido separo nuestros labios y me recosté cansada sobre su pecho.

-Buenos días--dijo con la respiración agitada y yo reí 

Ni siquiera dormimos, habíamos tenido sexo toda la maldita noche, si, eso pasaba cuando ambos estábamos en abstinencia por mas de tres días. 
Completamente cansados tomándonos una ducha y nos colocamos la ropa que traíamos ayer en la noche, mire en su teléfono que eran las cinco de la mañana, casi iba a salir el sol por lo que debíamos procurar llegar al campamento antes de que todos se levantaran.

Arregle la cama que era un desastre y ni siquiera era nuestra, tuvimos que limpiar los rastros de semen que hubiera por ahí y salimos de la habitación como si nada, bajamos las escaleras para salir de la casa que nos resguardo una hermosa noche y cerré bien la puerta incluso para ahorrarles las personas de las cámaras un robo.

-Yo digo que deberían contratarnos para su pelicula--dijo Cornelio entrelazando su mano con la mía y reí

-Casi no puedo caminar--dije

-Ven, sube a mi espalda yo te llevo

-¿No estas cansado?--pregunte 

-Para ti nunca--comento guiñándome un ojo haciéndome sonreír 

Se agacho y subi a su espalda, el me sostuvo por los muslos mientras que yo cruce mis brazos en su pecho y apoye mi barbilla en su hombro.

-Te amo--dije tiernamente dejando un beso en su cuello 

-Y yo a ti--dijo riendo 

Duramos varios minutos caminando, por suerte al ser ya de día se veía mucho mas el bosque con claridad y encontramos el campamento mas rápido de lo que pensábamos. Había bajado de su espalda y me dijo que fuera primero a lo que sentí. 

Llegaba y tan solo algunos estudiantes salían de sus tiendas, ni siquiera me prestaron atención así que solo entre a la de nosotras rápidamente para encontrarme con Dayana mas dormida que la bella durmiente.

Cuando todos despertaron Dayana fue a ducharse a las cabañas mientras que yo solo me cambiaba de ropa y me ponía mas presentable, hoy íbamos a volver a Seúl por lo que estaba realmente emocionada de pisar la modernidad de nuevo.

A la hora del desayuno le explique a Dayana todo lo que había sucedido, ya Cornelio había vuelto hace rato y por suerte nadie sospecho alguna cosa extraña. Nos dieron tiempo de recoger nuestras cosas y cerrar nuestras tiendas, pues los buses escolares vendrían en unas horas.

-¿Entonces que no te haya acompañado al baño fue bueno?--pregunto Dayana 

-Realmente bueno 

-Pudo pasarte algo si ya sabes quien no iba 

-Pero no paso, al contrario, fue una experiencia increíble--dijo sonriente 

-Ustedes dos son dos hornos de microondas--dije riendo 

Horas después cuando los buses del colegio llegaron subimos a estos, yo completamente aliviada de poder llegar a nuestro apartamento rápido y podemos descansar ya que ambos no hemos dormido absolutamente nada.

Dayana me dijo que me sentara con Cornelio así la profesora de artes no lo molestaba, pero sinceramente me daba miedo, si, me da miedo sentarme al lado de mi novio pero no entra a una casa privada y tener sexo salvaje con el ¿Qué cosas no?

Tome valor y me senté a su lado tomándolo por sorpresa pero el no se negó, mire que la maestra subía dispuesta a sentarse al lado de mi Cornelio pero la verme sus esperanzas desaparecieron, evite su mirada para no reírme en su rostro y simplemente mire mis dedos.

Cornelio me dio uno de sus audífonos para que escuchara música con el desde su celular y yo con gusto lo acepte, adoraba estar con el aunque durante todo el viaje en el autobús debíamos actuar como lo que éramos realmente, profesor y alumna.

Cuando por fin llegamos a la escuela todos tomamos nuestras cosas y los chicos esperábamos a que sus padres vinieran por ellos, Dayana se había ido con sus papás y yo tuve que ir al apartamento sola ya que Cornelio debía quedarse con los otros maestros a dar una evaluación del viaje que hicimos.

Al entrar al apartamento solté un suspiro de alivio, deje las cosas sobre el sofá de la casa y fui a la cocina por algo de agua. Una vez me tome el vaso de agua fría a nuestra habitación para caer rendida sobre la casa estaba tan cansada y tenia mucho sueño que ni siquiera supe en que momento me dormí.

(...)

-¿Que tal?--le pregunte a cornelio cuando llego de la escuela 

-Aburrido, pero al fin llego--dijo quitándose sus zapatos 

-Desperté hace poco, ¿por que no duermes mientras hago algo de comer?--pregunte acariciando su cabello 

-¿No quieres ayuda?--pregunto 

-Ambos sabemos que pasa contigo y la cocina--dije riendo

-Si...no soy bueno en eso--comento 

-Yo te despierto no te preocupes--dije y bese sus dulces labios 

Entre a la cocina y comencé a hacer la cena, realmente me estaba muriendo de hambre. Mientras cocinaba escuche mi teléfono sonar sobre el escritorio de Cornelio ya que lo había dejado cargando ahí. Me llamaba un numero extraño así que conteste algo confundida para ver de quien se trataba.

-¿Hola?--pregunte y escuche un sollozo en la otra linea

-¿Quien es?--pregunte y solo escuchaba sollozos de una mujer 

-Disculpe, creo que se ha equivocado de numero--dije y colgué la llamada

Deje el teléfono en donde estaba y antes de volver a la cocina volvió a sonar molestándome. lo tome de nuevo viendo el numero que me había llamado hace unos segundos.

-Oiga si no me va a hablar...--la mujer me interrumpió 

-Tn, soy...mamá--dijo con la voz quebrada

Enamorada de mi profesor --CVJR-- +18Where stories live. Discover now