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Sus pensamientos daban vueltas pero todo caía a lo mismo. "Ojalá esto no pase a mayores" se repetía una y otra vez en su mente mietras movía el pie desesperadamente intentado de calmar la anciedad que le carcomía por dentro, Rogaba, imploraba, deseaba que esto se terminara.

Se comenzó a decir a si mismo
"Ubiera puesto los cristales en otro lugar"

"Ubiera Sido más cuidadoso"

"Ubiera puesto seguridad"

"Ubiera llegado antes"

"Ubiera... Ubiera..."

tantos Escenarios en donde para el las cosas saldrían mejor; más sin embargo este sería uno de los días más importantes de su vida que lo cambiará todo.

Tal vez su destino no ubiera sido conocer a aquel asistente de Heimerdinger al que desconocía su nombre aún.

Tal vez su destino no era ser el hombre del Mañana.

Sintiendo un vacío y al no saber cómo continúar con su proyecto todo se había vuelto gris para el, había dedicado meses, y horas perdidas de sueño con tal de conseguir su objetivo, y ahora lo había perdido.

Se encontraba en los destrozos de su habitación, el gran hueco que había provocado la explosión de aquel día,  al borde de lo que quedaba, un acto cobarde que nescesita valentía para ser realizado,

Jayce estaba a un paso de caer cuando una voz por detrás hace presencia.

-¿Estoy interrumpiendo?
Dijo aquella voz. Jayce volteo violentamente a ver de quién se trataba, era el.

Aquel asistente Liciado de Heimerdinger estaba ahí y ahora en su habitación. Lo tomo por sorpresa claro, pero ¿porqué la gente viene así de repente? ¿No lo piden dejar en paz? Pensó él

-¡¿Cuál es tu problema?!
¿Que es eso? Otra lista con mi nombre

- de hecho si, pero solo porque firmaste tus notas, Cada página debo añadir mhh, es un poco ególatra ¿No lo creés?

-¿Por eso viniste? ¿Para insultarme?

El chico contrario denegó con la cabeza

-no, no, estaba intrigado por lo que dijiste en el juicio

-Entoces no eres el único

-Si, bueno quería hablar sobre tu trabajo
Insistió

-esta teoría hextech que desarrollaste

-No es una teoría.
Contesto el de piel morena
-Vi con mis propios ojos lo que la magia puede hacer, las vidas que puede salvar, no tienes idea de lo hermosa que es

Dió una pausa y se dió la vuelta perdiendo de vista al chico de ojos dorados

-Pero se terminó, nadie me cree
Añadio al último Jayce

-Nunca nadie a creído en mi, pobre Liciado del Distrito suburbano.
Fuí un forastero en el momento que puse un pie en Piltover. No tenía los privilegios de un benefactor o un hombre, solo creí en mi mismo; y por eso estoy aquí.

Dijo el chico posandose al lado de Jayce mientras miraba la cuidad

-porque creo que tienes un propósito, Quiero ayudarte a completar tu investigación

-He Likes The Another Girl- Jayce X ViktorWhere stories live. Discover now