ℂ𝕦𝕒𝕣𝕖𝕟𝕥𝕒 𝕪 𝕔𝕦𝕒𝕥𝕣𝕠

59 6 121
                                    

Lucy miró por la ventana del avión. Aunque había viajado varias veces en las últimas semanas, yendo de un lugar a otro del mundo, su miedo a las alturas no desaparecía. París estaba todavía a muchos metros por debajo y desde allí se veía como una ciudad muy grande, atravesada por un río de aguas oscuras. Tomó con más fuerza la mano de Jungkook. Siempre había querido ir a París, pero antes no creía que pudiera hacerlo, si ni siquiera podía salir de la ciudad, menos aún, del país. Pero las cosas habían cambiado drásticamente, y ya podía hacer todas esas cosas con las que antes solo soñaba. Para ella fue un alivio volver a tener los pies en la tierra. Durante todo el viaje del aeropuerto al hotel, no dejó de mirar por la ventana, admirando la ciudad. Dejaron las maletas en el hotel y salieron.

—¿Cuánto tiempo estuviste aquí? —le preguntó Lucy a Cassandra, mientras entraban en una tienda, pues habían ido de compras.

—Cuatro años —Cassandra fue directo a mirar un vestido negro.

—Con razón hablas francés tan bien —intervino Hoseok, mientras se le acercaba y la tomaba de la mano.

Cassandra se encogió de hombros.

Lucy se quedó mirando un bolso. Siempre le había gustado coleccionarlos, aunque todavía no tenía tantos como quisiera. Ni siquiera preguntó el precio, sacó la Black card y lo pagó.

—Seguro que ese vestido te quedará muy bien —le dijo Jimin a Cassandra, que no se decidía a comprarse un vestido de terciopelo negro.

—Tiene algo que no me cuadra —le respondió Cassandra—. Debe ser el escote.

—Si fuera tú, lo compraría —sugirió Jimin, mientras tomaba una chaqueta negra para mirarla de cerca.

Pasaron casi todo el día recorriendo la ciudad y comprando cosas. Era pasado el mediodía cuando se sentaron en un café y pidieron croissants con capuchino para descansar antes de seguir comprando.

—¿Qué tal les ha parecido París? —preguntó Cassandra.

—Bonito —respondió Lucy.

—Ya había venido, pero solo una vez —dijo Jungkook, antes de probar el croissant.

—La única vez que había venido fue conmigo —dijo Jimin, y se pasó la mano por el cabello.

Jungkook sonrió.

—Y nuestras maletas terminaron en Madrid por equivocación.

—¿En serio? —preguntó Hoseok.

Jimin asintió.

—¿Cassie? —preguntó una voz desconocida.

Cassandra se giró para ver de quién se trataba y sonrió.

—Hola, Hyung Sik —saludó, y sonrió.

Lucy lo miró, quien había saludado a Cassandra era un chico realmente atractivo.

—¿Cómo estás? —preguntó— tiempo sin verte.

—No planeaba regresar tan pronto, pero ya ves.

—¿Vas a volver a vivir aquí?

—No, ahora mismo estoy de un lado a otro del mundo, entonces creo que al menos por ahora no voy a establecerme en ninguna parte. Pensaba que ya no vivías aquí.

—En un mes regreso a Corea.

—No esperaba encontrarte así tan de casualidad.

—Fue una bonita casualidad, me alegra volver a verte.

Todos estaban escuchando con atención la conversación entre Cassandra y Hyung Sik. Peter se acercó para decirle algo al oído a Lucy.

—Cuánto apostamos a que se cogió a ese tipo.

𝓔𝓬𝓸𝓼 𝓭𝓮𝓵 𝓹𝓪𝓼𝓪𝓭𝓸 || 𝓙𝓮𝓸𝓷 𝓙𝓾𝓷𝓰𝓴𝓸𝓸𝓴Where stories live. Discover now