Capítulo 04

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En El Pueblo

Afuera en la casa de Hinata estaban Toneri y Kabuto con un plan.

Hinata tendrá la sorpresa de su vida -dijo Kabuto con una sonrisa.

Si, es su día de suerte -dijo Toneri con una sonrisa arrogante- Les doy las gracias por venir a mi boda -dijo mientras veía varias personas arreglando una campiña.

¡No puede ser verdad! No lo creo. ¡No puedo soportarlo! ¡Simplemente no puedo soportarlo! -decía Shion desesperada.

Oh, Toneri, ¡Dinos que no es verdad! -dijo Ino llorando desconsoladamente.

Lo sé -dijo Toneri el llanto de las tres rubias se hizo más fuerte- Muchachas...Solamente me voy a casar. ¿Esto no va cambiar sus atenciones para mí? -pregunto a las tres rubias con una sonrisa encantadora.

¡Oh no! -dijo Shion con una sonrisa.

¡Nunca! -dijo Temari apoyando a su hermana.

Bien -dijo Toneri frotando sus manos juntas- Bueno...Si va haber una boda, ¡Debería preguntarle primero a la novia! Ver si acepta -dijo luego se ríe junto los aldeanos risa grande calurosa. Las muchachas vuelven a sus lágrimas- Escucha Kabuto cuando Hinata y yo salgamos -dijo dándole indicaciones a Kabuto.

Ya sé, ya se yo empiezo la música -dijo Kabuto volteándose a dirigir a los músicos los cuales comienza a tocar.

Aun no -grito Toneri enojado y golpea con una tuba en la cabeza a Kabuto.

Lo siento -dijo Kabuto disculpándose.

Dentro De La Casa De Hinata

Hinata se encontraba sentada en la sala cómodamente leyendo su libro, en eso toca la puerta se levanta dejando el libro en la mesa abierto donde está leyendo, se asomo a la ventana cuando ve a Toneri con una sonrisa, Hinata aparto con cara de horror y abre la puerta

Toneri -dijo Hinata con una sonrisa fingida y Toneri entra como si nada- Que bonita sorpresa -dijo mientras se hacia atrás.

Si, es cierto estoy lleno de sorpresa -dijo Toneri acercándose a Hinata que se alejaba de él- No hay ninguna chica aquí en el pueblo mataría por estar en tu lugar este es el día -dijo viéndose en el espejo mientras intentaba sacar algo entre sus dientes con la lengua- Este es el día que se cumple tus sueños -dijo intentando acercarse más a Hinata que seguía huyendo de él.

¿Y tú qué sabes de mis sueños Toneri? -pregunto ella con una sonrisa fingida atrás de la mesa.

Mucho -dijo Toneri tomando asiento donde estaba antes Hinata leyendo y poniendo sus zapatos encima de la mesa llenando el libro de lodo- Imagínate esto: Una cabaña rústica, mi última presa de caza asándose en el fuego, y mi mujer masajeándome los pies, mientras los pequeños juegan con los perros en el suelo. ¡Tendremos seis o siete! -dijo imaginándose todo lo que dijo con una sonrisa mientras se quita la botas dejando así oler sus horribles pies mientras Hinata se aguantaba el asco.

¿Perros? -pregunto con una sonrisa fingida mientras Toneri se levantó de la silla.

¡No, Hinata! ¡Muchachos fuertes! ¡Como yo! -dijo Toneri tocándose el pecho, Hinata aprovecho agarrar su libro.

Imagínate -dijo Hinata comenzando a caminar mientras limpiaba su libro

¿Y sabes quién será mi esposa? -pregunto Toneri mientras se acerba por atrás.

Déjame pensar -dijo Hinata con cara de asco.

Tú, Hinata -dijo Toneri atrapando a Hinata sorprendida volteo.

Toneri -dijo alejándose de Toneri- Me dejas sin habla -dijo fingiendo estar apenada mientras se pegaba a la puerta, mientras Toneri se acerca a ella con una sonrisa triunfal- Y no se contestarte

Jejeje di que me aceptas -dijo Toneri colocando sus brazos a lado del rostro de Hinata.

Lo siento tanto, Toneri -dijo Hinata mientras acercaba su mano a la perilla para abrir la puerta- Pero... -dijo agarrando la perilla mientras Toneri se acerba a darle un beso a Hinata- No te merezco -dijo abrió la puerta mientras se apartaba dejando salir a Toneri de golpe de su casa.

En eso se escucha una música mientras que Toneri estaba deboca abajo en el lodo y Hinata tiro sus botas apestosas fuera de la casa. Kabuto dándose cuenta de que Toneri está en el lodo se acercó al charco.

Bueno que te dijo -dijo Kabuto con una sonrisa.

Tendré a Hinata como mi esposa de eso no hay duda -dijo molesto agarrando del cuello a Kabuto y tirándolo al lodo.

Que carácter -dijo Kabuto a un cerdo que estaba hay que hizo un ruido de aprobación a lo que dijo.

Mientras Toneri caminaba hasta el pueblo mientras se quitaba el lodo de su rostro. Hinata sale de la casa.

¿Se ha ido? -dijo Hinata a una gallina viendo que ya no estaba salió y agarro la cubeta con alimento- Oh, ¿Se lo imaginan? ¡Me pidió matrimonio! Yo, esposa se bruto, mal educado... -dijo enojada mientras se daba la vuelta donde estaba las gallinas- Ni hablar, yo no seré su esposa, lo garantizo

Termino de limpiar y darle de comer a los animales, se fue hacia la colida donde se sentó debajo de un árbol viendo el atardecer.

Solo quiero vivir y tener aventuras. Y poner contar con un amigo de verdad que sepa escuchar -susurro Hinata.

En eso se escucha un rechinido desde lejos venia Byakugan corriendo con la carreta y Hinata se levanta para acercarse al caballo.

Byakugan -dijo Hinata sorprendida viendo al caballo- ¿Dónde está papa? ¿Dónde? ¿Qué paso? -dijo preocupada viendo que su padre no estaba- Tenemos que buscarlo -dijo desatando las corras de la carreta a Byakugan y se montó- Llévame con él

La Bella y El ZorroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora