Capítulo 12

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Al día siguiente

Hinata estaba afuera en la nieve con un vestido lila caminado con Byakugan en eso aparece Akamaru corriendo tirándose en la nieve y luego se voltea para correr a los brazos de Hinata, esta lo recibió con una sonrisa ya que era el único que no le afectaba la maldición, desde lejos Naruto la veía desde su despacho junto con Kiba y Shino.

Nunca había sentido algo así por alguien -dijo Naruto viendo a Hinata- Quiero hacer algo por ella... -dijo impulsivamente mirando a Kiba y Shino que estaban entre las sombras- Pero ¿Qué?

Bueno hay tantas cosas, flores, chocolates, promesas que no intente cumplir -sugirió Shino negando con la cabeza por lo último.

No, no. Tendrá que ser algo muy especial. Algo que sea de su interés algo... -dijo Kiba pensando en una idea cuando recordó algo- Un momento

Naruto y Hinata se encontraban en uno de los pasillos de la mansión.

Hinata, hay algo que quiero mostrarte -dijo Naruto abriendo un poco la puerta y luego la cierra- Pero, primero cierra -dijo con una sonrisa cosa que Hinata puso su cara de no muy confiada- Es una sorpresa -dijo y Hinata cerro los ojos confiando en Naruto.

Naruto le paso su pata enfrente de la cara para cerciorarse que no estaba viendo, abrió las puertas, emocionado agarro de la mano a Hinata guiándola lentamente dentro de la habitación.

¿Puedo abrirlo? -le pregunto Hinata curiosa.

No, todavía no -contesto Naruto mientras seguía guiando a Hinata hasta en medio de la habitación- Espera aquí -dijo alejándose abriendo las cortinas para iluminar el lugar.

¿Ya puedo abrirlos? -dijo Hinata emocionada.

Está bien, ahora -dijo Naruto emocionado por ver la reacción de Hinata.

Ella abre sus ojos y queda sin aliento y muy sorprendida por ver varios estantes llenos de libros hasta el techo.

¡No puedo creerlo! ¡Nunca en mi vida había visto tantos libros! -dijo Hinata viendo a su alrededor.

¿Y te gusta? -pregunto Naruto apenado.

¡Es maravilloso! -dijo Hinata observando todo.

Todos es tuyos -dijo Naruto sorprendiendo a Hinata por lo que acaba de escuchar.

Ah, muchísimas gracias -dijo Hinata contenta agarrando de las manos a Naruto.

Mientras en la puerta de la biblioteca estaban todos viendo la bonita escena entre Naruto y Hinata.

Oh, que te parece -dijo Kurenai a Kiba contenta.

Oh sabía que resultaría -dijo Kiba contento por su idea resulto todo un éxito.

¿Qué cosa? -le pregunto Mirai a todos sin entender que pasaba.

Jeje, es muy alentador -dijo Shino mientras se iba en el pasillo.

Es emocionante -dijo Tamaki lleno atrás de atrás de Kiba que se iba.

Mama yo no vi nada -dijo Mirai enojada acercándose a su mama.

Vamos, Mirai hay cosas que hacer en la cocina -dijo Kurenai comenzando a caminar hasta la cocina.

Pero de que están hablando, ¿Qué está pasando? Dime mama -preguntaba Mirai mientras caminaba alado de su mama.

En la hora de la comida se encontraba en el comedor sentados uno al frente del otro Hinata y Naruto, Kurenai y Mirai estaba viendo todo. Después de que les sirviera la sopa Hinata agarro su cuchara se llevó a la boca un poco de la sopa que estaba deliciosa cerrando sus ojos recordando el dulce sabor, pero a abrirlos vio a Naruto comiendo desde su plato y alzo la cara todo lleno de comida y la boca llena. Kurenai y Mirai solo pusieron una sonrisa no puede ser. Hinata sorprendida y avergonzada por los malos modales de Naruto. Naruto se limpiaba la comida de la cara con su brazo y Kurenai con los ojos le señalo la cuchara, Naruto nervioso con su pata agarro la cuchara apretándola, sorprendiendo por tal acción a Hinata, Naruto agarro un poco de la sopa y abrió su asico intento que esta entrar a su boca pero fallo, Mirai solo se río se calló a ver la mira de enojo de su mama, Hinata vio su cuchara la dejo a un lado y agarro su plato y mostrándosela a Naruto se animó e hizo la misma acción de Hinata alzaron sus plato y dieron salud para beber desde el plato.

En el jardín

Naruto y Hinata estaban en la nieve para alimentar a los pájaros.

Qué gran bondad esconde, aunque al principio era rudo y malo -pensó Hinata mientras le da un poco de comida a Naruto el cual se agacha.

Hinata vía con interés a Naruto como intentaba darle comida a los pájaros mientras se acercaba, pero solo hacía que los pájaros se alejaran, Hinata negó con la cabeza por la forma que hacia las cosas Naruto se acercó a él y se agacho le dio más comida en sus manos agarro si manos y lo asentó cerca de un pájaro Hinata agarra un poco de la comida en las manos de Naruto y lo tira en la nieve un pájaro, el pájaro siguió el camino de comida hasta llegar a las manos de Naruto el cual se emocionó.

Me miró y cuando nos tocamos no me rechazo -pensó Naruto sintiendo como su corazón latía.

Naruto veía a Hinata como ella mostraba una sonrisa como un pájaro se le ponía en su mano y ella se levanta alejándose de él, Naruto vio desde lejos como se acercaba Hinata a un árbol y dejaba libre el ave, Hinata lo volteo a ver y se escondió atrás de un árbol.

Hinata se quitó la capucha de su capa y se asomó desde árbol a ver a Naruto, que le vio con ternura lleno de aves en los brazos y cabeza los cuales se fueron por algo y Naruto se puso feliz ya que le estaba molestando cuando una bola de nieve es tirada a su cara, se quitó un poco viendo con su ojo a Hinata la cual se reía de él.

Naruto preparaba una gran bola de nieve la alzo para tirar a Hinata, pero no fue tan rápido y Hinata le tiro otra bola de nieve ocasionado que la bola que tenía Naruto en su cabeza la soltara y la nieve le cayera a él. Kiba y los demás veían todo desde una ventada como Naruto perseguía a Hinata la cual se cubría mientras Naruto intentaba atraparla.

Después de un rato entraron a la mansión y fueron a la sala Naruto ayudaba a quitarle la bata a Hinata y la puso en un perchero, mientras Hinata cargaba un libro y se sentó enfrente de la chimenea y Naruto se sentó a su lado comenzando a leer el libro juntos, mientras los demás los veía desde la puerta.

Y puede ser que haya algo más allí -dijo Shino confiado a todos.

¿Qué? -pregunto Mirai confundida, le dio una mirada a su mama- ¿Qué cosa es, mamá?

Te lo diré cuando seas grande -dijo Kurenai beso a su hija en la nariz.

Mientras Kiba y Tamaki cerraban las puertas de la sala dándoles privacidad a Naruto y Hinata.

La Bella y El ZorroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora