Uno piensa que si te dan la oportunidad de reencarnar o viajar a otro mundo, te enviaran a un mundo de fantasía con demonios, elfos, bestias, etc...
Pero en mi caso en vez de ir a esos mundos épicos, me envían aun mundo de caballos!!!.
Esta es mi h...
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El silencio se pasmo en lo que alguna vez fue la ciudad insignia de equestria.
La elegante Canterlot tierra hogar de los unicornios y las princesas alicornios.
Ahora eran ruinas y nada más que eso, cráteres, escombros y destrucción...
Solo destrucción...
Un escenario aterrador como si una guerra hubiese pasado en aquella ciudad tan gloriosa.
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La sangre broto en un chorro con fuente en plaza concurrida, una masa oscura broto del brazo, deslises de magia negra mezclada con la sangre roja del unicornio.
Un alarido de dolor breve que se intensificó luego de unos segundos.
La sorpresa paso a miedo al ver su brazo izquierdo volar libre fuera de su cuerpo.
El grito fue silenciado, apretó los dientes en dolor, soporto aquel ardor que broto con un chorro de sangre sólo por mantenerse consciente de su alrededor.
El dolor fantasma, el que su cerebro aún no pueda procesar que su brazo no esté ahí aún viéndo su herida.
Siempre pensó que aquello era solo una exageración pero ahora que lo experimentaba, lo entendía.
Trataba de de cerrar el puño, mover los dedos pero no podía, aún así su mente ya difusa por la batalla, débil y nublada intentaba mover su brazo faltante.
Su mente divago unos instantes, aquello aprovechado por su enemigo que forzó sus ataduras conectando un golpe.
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Eso era todo?.
Ya no podía seguir luchando, no así...
Su fuerza ya hace mucho que abandono su cuerpo, lo poco que lo mantenía era su promesa de no dejarlos avanzar hacia sus amigas.
El cansancio inundó su mente, sólo quería dejar de hacer esfuerzo cerra los ojos y dejarse abrazar por el descanso final.
