Capítulo 1: Todo se trata de confianza

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"El 90% es confianza, y lo bueno de ella es que no saben si es real o no, si eres la persona más segura de ti misma o si en realidad te estás muriendo de nervios por dentro". Cuando luces confiado, las personas que te rodean o simplemente te observan caminar por el pasillo del instituto de danzas urbanas más prestigioso del país (como es mi caso), tienen una buena percepción de ti, o al menos dentro de lo que puedes deducir de una persona cuando la ves por primera vez. La confianza siempre había sido mi arma de defensa después de todo lo que había sucedido en mi vida así que en ese momento tan importante solo podía concentrarme en lucir segura, hermosa, imponente y con determinación cuando en realidad era un manojo de nervios andante.

Cuando pasas de ser la chica que lidio con el bulling por años, a ser conocida en redes sociales y tener amigos te sientes increíble o al menos así fue para mí, pero  al final del día me seguía sintiendo como esa niñita insegura y con miedo que llegaba a su casa a llorar después de la escuela; ahora estaba cumpliendo el sueño de entrar a dance art, la escuela de danzas de calle más famosa a nivel nacional, estaba feliz y emocionada y tenía ganas de ir saltando por todo el lugar mientras me presentaba a los estudiantes, pero como mencioné antes, la imagen de confianza y actitud para mí lo era todo y eso estaba tratando de demostrar.


Al entrar me encontré con un edificio muy moderno, con pisos y paredes blancas y techos muy altos, rodeado de bailarines que al igual que yo querían ser alguien importante dentro de la cultura callejera, caminé con toda la actitud y cara de culo que pude reunir y de reojo pude identificar a algunos bailarines que conocía y que admiraba muchísimo, pero que en esta nueva etapa de mi vida también podían ser una amenaza ya que en la danza todo es una competencia; así que empecé a crear mi perfil de cada uno de ellos para saber a que me enfrentaría:

A la primera que noté fue a Valery: típica chica rica que ha bailado en las mejores academias, sin embargo ganó una beca al igual que yo para estar aquí, todos la alaban y es muy buena, sobre todo haciendo krump y hip hop. Ella (según yo) iba a ser mi mayor rival, con lo que no contaba en ese entonces era la cantidad de personas y secretos que conformaban a este instituto y todo lo que descubriría luego que dejaría a Valery como el menor de mis problemas.


-Hola! Bienvenida a dance art Gia... una voz muy dulce me sacó de mis pensamientos, era Jenny, la directora del instituto quien venía a darme la bienvenida, estaba acompañada por un chico que no había visto antes, era alto, de piel blanca y cabello negro en forma de libro.

-Hola, si gracias es un honor estar aquí, yo... me oí responder más nerviosa de lo que quise sonar.

- lo sabemos- respondió. - Él es Josh, uno de nuestros mejores estudiantes te llevará a tu habitación y te explicará los horarios. Recuerda que hoy en la noche es la batalla de inicio donde todos eligen sus crews o deciden si bailarán solos, debes anotarte y colocar que estilo vas a defender, por ahora los dejo- dijo dándose la vuelta para marcharse.

- Bueno Gia, yo no soy guía turístico así que te llevo a tu habitación, te doy la planilla de registro y es todo, no tengo tiempo para esto- dijo Josh poniendo los ojos en blanco.

- Tranquilo no necesito guías, aún más si son tan antipático como tu- le dije con una sonrisa falsa en el rostro. 

- Como sea, vamos ya. Comenzamos a caminar por el pasillo y subimos al tercer piso dónde se encontraban los dormitorios, debo admitir que el mío era precioso y tenía muchas ganas de gritar de la emoción pero no lo haría delante de ese chico ¿que le pasaba? a pena cruzamos palabras y ya estaba siendo bastante odioso.

- Bueno aquí estamos, llena esta planilla y dime que estilo defenderás esta noche- me dijo entregándome el tonto papel que debía llenar. -Haré hip hop, obvio- dije sin mirarlo mientras llenaba la planilla.

- Otra básica... lo oí susurrar y allí si que me enojé mucho, odiaba a esas personas que criticaban el género que originó todo solo porque ellos bailan algo moderno.

- ¿Disculpa? y tu bailas ballet o  que? le dije entregándole de mala gana la hoja, no quería discutir pero a veces me era imposible quedarme callada. 

- No, hago popping lo cual es mucho mejor- respondió con una actitud bastante altanera que me hizo comenzar a tenerle cierta rabia cuando a penas lo estaba conociendo. - pero no pienso discutir las razones por las cuales mi estilo es mejor, así que adiós. Dijo saliendo y lanzando la puerta de un golpe.

Arg, me dejó a mi hablando sola, ¡que imbécil de mierda! , yo siempre tengo la última palabra.Después de ese inicio sabía que las cosas no iban a ser tan fáciles así que me decidí a tomar toda la tarde para entrenar para la batalla que habría esa noche, ya desempacaría luego; solo estaba rezando para tener la suerte de batallar contra el y así demostrar de lo que soy capaz, sí, la verdad es que ser competitiva era parte de mí y más si era con alguien que me trataba de la forma en la que ese tal Josh me acababa de tratar. Con lo que no contaba era con todas las cosas que pasarían esa noche y que cambiarían totalmente el curso de las cosas...


Bailando con el diabloWhere stories live. Discover now