El verano en el que me enamoré|| Jeremiah Fisher

007

–Es que hoy por la noche hay una película en el autocine y me preguntaba si querías ir

–Claro, sí. ¿Los chicos ya lo saben?

–Quería que fuéramos tu yo, solos.–No me lo esperaba

–Oh, emm.... Sí, claro. ¿Por qué no?

–Vale, perfecto.–Se le notaba feliz–Pues a las siete estate preparada–Se iba a ir, pero volvió –Por cierto, es una cita

Voy a tener una cita Con Jeremiah. No podía verme, pero se que estaba roja.

De repente me entraron mil dudas. ¿Que mi voy a poner? ¿Como tengo que actuar? Mi primera cita, y va a ser con él. Necesito hablar con alguien urgentemente otra vez.

☕︎☕︎☕︎

–Las hermanas Conklin van a tener una cita esta noche con los hermanos Fisher. Irónico, ¿Verdad?–Las tres reímos–Me alegro por vosotras. Lily, te puse en la maleta un top morado con una falda blanca. Póntelo, te quedará bien. Y chicas, no estéis nerviosas.

Colgamos a Taylor y nos preparamos. Sinceramente, iba preciosa.

Ya eran las siete. Belly, Conrad y yo estábamos esperando en la cocina. Yo estaba muy nerviosa y Conrad lo debió de notar. 

–Lily, tranquila. Solo tienes que ser tu misma. Conociendo a mi hermano, no sé si le gustas, pero le llamas la atención. Aprovecha esta oportunidad

–Gracias Connie

–¿Nos vamos?–dijo Jer entrando por la puerta

Cada uno fue en su coche, no queríamos ir todos juntos porque queríamos privacidad.

Llegamos allí. Sinceramente no estaba haciendo caso a la película, estaba nerviosa. Le miré la mano. La tenía apoyada en el asiento. Yo la dejé cerca de el para ver si pillaba la indirecta, y lo hizo. Me agarró de la mano y entrelazó los dedos. Estaba muy cómoda a su lado.

De repente el me miró. Me giré para verle y nos quedamos mirando. Se empezó a acercar y puso su mano en mi cara. Podía sentir su respiración y estoy segura de que el podía notar el ladito de mi corazón.

Ninguno de los dos hacia nada. Amaba la tensión que había entre nosotros dos. El se acercó más y yo me aparté.

No sé por qué lo hice, fue un impulso. Necesitaba besarle. Podría girarme y hacerlo, pero preferí salir a por un granizado.

Le dije que ahora volvía y salí. Belly me vió y vino conmigo. Yo le conté todo lo que había pasado.

–Pobre Jer. El intentado ligar contigo y tu apartándole–Las dos nos reímos

–Yo quería, pero no estoy preparada. Siento que como esto acabe mal, la amistad que hemos construido durante tantos años se joderá. Y yo no quiero eso. Tengo miedo

–Lo real asusta Lily, pero es normal

–¿Tú crees que lo he fastidiado?

–Si fuera otro, probablemente sí. Pero es Jer, si de verdad le gustas te entenderá

–No sabemos si le gusto

–Ehmm... Claro, claro. Si, es verdad–Que mal disimula

–Bells ¿Algo que contarme?

–Si, que disfrutes con Jer y no estés nerviosa –Eso no me sirve

Pasó el tiempo y yo quería arreglar las cosas con Jeremiah. No había echo nada malo, pero sentía que lo necesitaba.

Respiré y conté hasta tres. Estaba decidida a decirle algo

–Ehh–Estaba nerviosa–Jer–El ruido de un coche hizo que nos distrajeramos. Era mi hermano.

Aparcó en el sitio libre que había entre el coche de Jer y el de Conrad.

–¿Pero qué narices haces aquí?–Le pregunté enfadada

–Me habíais dejado solo en casa y me aburría y he decido venir a molestaros

A los chicos les hizo gracias, pero a Bells y a mi nos entraron ganas de matarle.

Sí antes no me atrevía a decir nada, imagina ahora con mi hermano al lado. A veces me gustaría que solo fuéramos dos.

Se acabó la película y volvimos a casa. Ni siquiera esperé a que Jer viniera a la cama porque me dormí nada más tocar la almohada.

☕︎☕︎☕︎

Hoy tenía comida con las debutantes, era lo que menos ilusión me hacía.

Me vestí y mi madre me llevó.

–Ya sabes que si tienes algún problema o te quieres ir dime la palabra de emergencia

–Lo sé mamá, tranquila. Adiós–Me despedí de ella

La palabra era Jelly Lell.y de limón. Muy infantil, yo misma lo reconozco. Pero esa palabra me ha salvado muchas veces de momentos incómodos.

Estaba andado tranquilamente hacia dentro del edificio cuando me encontré con Jeremiah

–Jer!!–No me veía–Jeremiah, hola

–Perdón Lily, no te había reconocido. Estás preciosa–Me agarró de la mano y me dió una vuelta

–Reconócelo, voy ridícula.

–Si fueras ridícula sería el primero en reírme de tí–Los dos nos reímos–Ven, te acompaño.

Subimos las escaleras mientras hablábamos y entramos en la sala. Estaba llena.

Cuando nos vieron todas se callaron para después empezar a susurrar mientras me miraban.

–Paige–Saludó Jeremiah a una señora–Esta es la joven de la que mi madre la habló. Lilian Conklin

–Llega tarde–Que maja ella (que se note mi sarcasmo)

–Si, lo sentimos. Lilian ha tenido unos inconvenientes y la ha sido imposible poder asistir antes a su clase–La señora suspiró

–Espero que no se vuelva a repetir. Mesa 2

–¿Eso son los pastelitos de mermelada y crema de cacahuete?

–Si, pero no cojas. Son para las chicas–Jeremiah no le hizo caso a Paige y robó uno de los pastelitos–¡Jeremiah!

–Perdón, perdón. Solo es uno–Dijo a Paige–Suerte Lily–Me besó la mejilla

Intenté quedarme quieta e intentar andar como pude. Estaba desconcertada después de lo de Jeremiah

Se me acabó la felicidad cuando vi quien estaba sentado al lado de mí. Era Nicole y Sheyla. La ex de Conrad y la novia de mi hermano.

No paraba de repetir Jelly Kelly de limón. Ni siquiera me había sentado y ya quería irme.

Me arrepiento de haber hablado así a Nicole, ella no tenía la culpa de que yo estuviera enfadada con Conrad.

Y siento que a sheyla podría darle mal por como me comporté con mi hermano.

Jeremiah, te necesito en estos momentos. Haz una de tus apariciones estelares.