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Capítulo 21

Había pasado ya una semana desde la pelea que había tenido la pareja, al igual que hace una semana un Jungkook triste se había aparecido en la casa de Namjoon.

—Namjoon Hyung, necesito su ayuda.

Decir que estaban bien era una amarga y dolorosa mentira.

Sus días se tornaron grises y no había más arcoíris o mariposas en el estómago, sus ojos llorosos y el alma partida los dejaban en la miseria.

Pero no podían dejarse caer, no era sano para ellos.

Retomaron sus rutinas pero su estado anímico no era el mismo que antes, y sus rutinas volvieron a ser igual o más monótonas que antes.

Jungkook se dedicaba a dar consultas y a estudiar aún más cada día sin descansar, no comía correctamente pero trataba de comer lo más saludable posible.

Taehyung por su parte, una vez que entraba a su salón de clases no salía de ahí; incluso se ofreció como maestro voluntario para dar tutorías. Cumplía con su tres comidas pero no eran las más saludables.

Ambos estaban mal, y lo sabían.

Taehyung había llamada reiteradas veces a casa de Jungkook, lo había ido a buscar y también le había mandado cartas por correo pero ninguno de estos llamados tenía alguna respuesta.

Al darse cuenta de esto decidió enviar una última carta en la cuál le decía al menor que le hablara cuando se sintiera listo para hablar.  Y desde ahí dejo de insistir.

Ambos se extrañaban, sabían que necesitaban su dosis diaria de amor pero ¿qué pasaría si no se arreglaban?, ellos tendrían que retomar sus vidas de la manera más sana posible.

Pero nada se podía quedar inconcluso.

...

—Y bueno alumnos eso es todo, recuerden que deben estudiar los temas de la página 200 porque en eso se basará su exámen—. Avisó Taehyung mientras borraba los apuntes del pizarrón.

—Entendido profesor Kim—. Respondieron al mismo tiempo a la par que guardaban sus pertenencias en sus respectivas mochilas.

Comenzaron a salir por la puerta despidiéndose de su profesor y deseándole un buen fin de semana.

—Tome esto como un consejo profesor, arregle los problemas que tenga con "pedacito de cielo" porque se ve como si fuera un zombie—. Dijo Hyunjin mientras daba un leve apretón de hombro.

Taehyung soltó una leve risa ante la mención del menor.

—Trataré de verme más decente joven, muchas gracias—. Sonrió ante la mención del menor.

Una vez que se encontró solo en el aula se tomó un tiempo para estirarse y pensar.

Era veintinueve de Agosto.

Analizó una vez más el calendario y se dió cuenta que faltaban dos días para el cumpleaños de su lindo pedacito de cielo.

Apoyó sus codos en el escritorio y escondió su rostro dentro de sus brazos.

Se había dicho que no lloraría más pero era imposible no sentirse mal ante su situación.

Poco a poco las lágrimas hicieron su aparición y los sentimientos de soledad pronto le hicieron compañía.

—Que asco, parece que no haz comido en días; dios, tus ojeras hacen que parezcas mapache.

Rápidamente subió su cabeza y mirada para encontrarse con el mejor amigo de su hermoso amor.