a mis diecisiete.

Chapter XIV

Cuando llegaron a la nueva casa fuera de Seúl, cada uno fue a su habitación correspondiente, YeonJun y SooBin tuvieron que dormir juntos porque solo eran cuatro habitaciones y BeomGyu quería dormir solo.

TaeHyun bajó una caja y le extendió una foto a SooBin.

─Toma, lo saque antes de que explotara la casa.

Miró la ecografía y sonrió.

─Gracias Tae, es muy especial para mí.

Asintió y se acercó a la habitación que era de BeomGyu, este le abrió y le hizo pasar.

─Puedes dormir todo lo que no hiciste durante el viaje, vamos a tomarnos algunos días para organizarnos bien.

─Está bien.

─También saqué esto.

Le mostró los zapatitos que SooBin le había regalado, sonrió y los tomó.

─Muchas gracias.

─¿Por qué los tienes? SooBin no le gusta mostrar cosas que tenía para su hijo con Arin.

─Verdaderamente no lo sé, solo me los dio aunque aún no sabemos el sexo, es bonito.

─Ya que estás aquí supongo que es porque serás el vientre que cargará a los cuatro herederos.

BeomGyu asintió algo incómodo.

─¿De quién crees que sea el bebé?

─No lo sé, es un poco raro que lo preguntes porque después de todo fue de creado de violaciones, pero no puedo dejarlo.

─No es fácil perdonar ¿verdad?

─Lo que ustedes hicieron no, no los veo como alguien cercanos solo son mis secuestradores aunque este esperando un hijo de ustedes.

─Lo entendemos BeomGyu, igual... ya sabes lo que va a pasar después de que des a luz a los cuatro.

Asintió.

─Bien, me retiro para que descanses. Hasta mañana.

TaeHyun se fue, BeomGyu cerró la puerta y se recostó con Shooky en su cama.

─Solo les daré su hijos, no podría pasar nada ¿verdad Shooky?

El perrito ladró, BeomGyu suspiró y acarició su cabeza para luego caer dormido.

Pensar demasiado le haría daño.

SooBin observaba la ecografía que le había dado HoSeok y la que tenía de su antigua novia, ambas fotografías eran diferentes en diversas maneras. El de BeomGyu recién se estaba formando y el de Arin ya estaba formado.

Llamó a todos sus hermanos a una reunión, los tres chicos llegaron con distintas cosas, TaeHyun comiendo, YeonJun con su videojuego y HueningKai con su peluche.

Los cuatro eran diferentes, cada uno tenía un gusto diferente dejando de lado el legado de las fortunas de la mafia. A YeonJun le gustaba el baile, TaeHyun le gustaba el canto, HueningKai disfrutar del aire libre y a él escuchar música viviendo una vida serena.

Pero no tenían una vida serena.

La veces que se descuidó habían acabado con lo que más quería en la vida, la muerte de YeWon, de su padre y EunBi eran su culpa.

─Voy directo al grano ¿A quién le gusta BeomGyu?

Sus hermanos se miraron entre ellos y levantaron la mano.

─Yo no lucharé por él.

─¿A qué te refieres, Soo?

─Me refiero que voy a romper este legado ahora, no me gusta BeomGyu jamás podría gustarme, si el bebé que espera es mío, tomaré al bebé y me voy.

─¿Te vas?

─Quiero vivir mi vida tranquila, los amo chicos, pero ya no quiero vivir así. Me gusta cuidarlos, pero tengo miedo que en un abrir y cerrar de ojos ustedes también desaparezcan.

─SooBin si es por lo mismo, déjame–...

─No, no puedes cambiar eso YeonJun, ya varias muertes han ocurrido mientras soy el jefe. No quiero perder a ninguno de los tres, no lo soportaría.

Se volvieron a mirar preocupados, sabía que desde la muerte de YeWon nada había sido igual para SooBin y menos ahora con la muerte de EunBi.

─Serás siempre un gran líder, SooBin, pero si es tu decisión lo aceptaremos.

─Espero que sean felices con cualquier que se gane el corazón de BeomGyu.

Salió de la oficina y caminó hacia la casa en el árbol donde jugaban de niños, ahí tenía planeado pedirle matrimonio a YeWon, pero las cosas no surgieron.

─Hubiera cambiado por ti, ahorita estaríamos con nuestro hijo y seríamos felices...

Escuchó unos ladridos a lo lejos, miró por la ventana y vio a BeomGyu jugar con Shooky. El menor se veía feliz, pero no lo era, no era feliz estando ahí con ellos.

YeonJun era el nuevo encargado de la mafia, él decidirá que sucederá con BeomGyu después de que ese bebé nazca, ya nada lo uniría ahí.

─Shooky ven, no puedo morderme mucho.

Vio como BeomGyu se sentaba en el césped y miraba cada flor que había por ahí.

─¿Cómo crees que estará mi familia? ¿Crees que me aceptarían así? ¿En este estado?

BeomGyu negó acariciando su vientre.

─No... tal vez papá me mataría y Hyuk se enojaría conmigo ¿Crees que tengo la culpa de haber sido secuestrado? Mi mente dice que si, lo odio ¿Tú me odias?

El perro ladró.

─Vamos adentro, hace un poco de frío.

Los vio alejarse y solo quiso que las cosas ya acabaran.