Enchanted | Yoonkook Kookgi

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No mentía cuando dijo que habían sido días ajetreados. Y es que al  llegar a su destino y con llave en mano al departamento alquilado para sus vacaciones, vio a Taehyung sentado de piernas cruzadas con su maleta marrón abrazado y los audífonos puestos.

Aparentemente en una de sus salidas, cuando aún estaba preparando el viaje en una cafetería, el más joven había echado ojo en su destino, y desobedeciendo a sus hermanos, había decidido marcharse detrás del mayor.

Yoongi no se había enfadado, ni mucho menos, pero cuando el chico usó el discurso de 'ir a por aquello que le hace feliz', no pudo evitar sentirse  conmovido, y entusiasmado.

Así que estar con Taehyung liberaba en parte la ansiedad que le causaba estar solo en un país ajeno. Algo que había ocultado a sus padres y amigos, pero que en el fondo sabía que le afectaba.

—¿Hoy qué haremos?

—Querías ir a ese sitio de música Jazz ¿No?—Regresó a ver a Taehyung que estaba despatarrado en el sofá jugando con su teléfono.

—Pero a Hyung no le gusta. —Quitó la vista del juego .— Da igual, puedo ir solo Hyung, no se preocupe.

—Ayer hicimos lo que quise hacer.

—Pero porque era dormir la siesta en la playa debajo de las sombrillas...eso era fácil.—Dijo Taehyung.

—Ve a arreglarte, dije que hoy haríamos lo que quisieras Tae...

—No discutiré Hyung, que conste que insistió. Iré a cambiarme.

Taehyung se marchó a la habitación que compartían y Yoongi vio de nuevo la fotografía de Jungkook. Aquella carita que le provocaba en ese momento algo de malestar, pero con la que no podía estar enfadado de ningún modo.

Aquella expresión dulce y carismática que hacía cuando se forzaba así mismo a mantener contacto visual con Yoongi.

Bufó.

Luego contestó los mensajes de Namjoon que le preguntaba sobre Taehyung, y los mensajes de Jimin que le contaban que le habían ascendido en el trabajo.

Cuando Taehyung regresó tras cambiarse, Yoongi no pudo evitar sonreír porque parecía sacado del viejo estilo londinense.

—¿Por qué me mira así?

—Te ves lindo, como un viejo millonario.—Se hundió de hombros.—Venga, salgamos ya, antes de que me de ganas de quedarme aquí.

Taehyung salió enseguida del departamento y tocó el botón del ascensor.

Mientras, en Seúl, Jungkook estaba teletrabajando en la casa de Jimin mientras esté le acariciaba el cabello.

—Jungkookie ¿quieres desayunar?

El menor negó.

—Podrías no se ...¿usar tus palabras? Desde ayer, no dices nada. No se si he hecho algo mal, o si necesitas que haga algo por ti.

Jungkook le quitó la mano al mayor de su pelo y tomó el portátil para salir de la cama e irse al pequeño estudio que tenía Jimin y encerrarse.

El rubio tocó el puente de su nariz cansado y se marchó a la cocina a hacerse el desayuno, recogió la habitación y mientras hacía el desayuno a Jungkook después de debatirse entre hacerlo o no, miró su instagram para encontrarse con la publicación de Taehyung. Una foto en la que salía Yoongi tocando un piano.

—¿Acaso viajaron juntos? No creo...debe ser una foto vieja...¿no?—Dijo en voz baja.

El menor que había salido a buscar un vaso de agua, lo escuchó y curioso se acercó a la espalda del mayor para ver a qué se refería.

—¡Jungkook!¡Me has asustado!—Bloqueó el móvil y terminó de servir.—Debo ir al trabajo, volveré rápido. Tienes listo el desayuno.—Besó escuetamente su frente y su comisura y se marchó conteniendo un suspiro, porque de verdad amaba al chico que ahora ni siquiera lo regresaba a ver.

Cuando Jungkook se quedó solo -mientras desayunaba - no pudo evitar buscar las redes sociales de Taehyung encontrándose con aquella foto y sintiendo aún más molestia, no sabiendo reconocer completamente su sentir.

Para ese entonces, Taehyung y Yoongi estaban ebrios bailando entre tanta gente en sus 70 u 80.

De un momento a otro Yoongi se había dejado llevar por Taehyung que sin vergüenza le daba vueltas, mientras Yoongi quería zafare de su agarre pero sin realmente intentarlo.

Estaba sonrojado ya sea por la situación o por el alcohol en su sistema.

Giraban y se reían.

Taehyung siempre había tenido esa labia para hacer sus caprichos realidad. Así que no era de extrañar que Yoongi cediera.

A la madrugada llegaron tras varios traspiés al departamento y terminaron dormidos en el suelo del salón, siendo Yoongi el que tuviera a Taehyung abrazado con brazos y piernas su cuerpo.

Mientras a esas horas, en Corea, Jimin estaba en la puerta del departamento de Yoongi, consciente de que no había nadie que lo fuera a abrir la puerta.

Porque claro, Yoongi estaba de viaje.

—Hyung...me siento raro. No se explicarlo pero es como si me molestara todo...¿tiene sentido?

Dijo apegando su frente a la puerta, no esperando que esta se abriera y se encontrara con Namjoon.

—¿Oh? ¿Jungkook-ssi? ¿Qué haces aquí?

Jungkook mal interpretando la presencia de Namjoon se cruzó de brazos y lo miró serio.

Namjoon ablandó su expresión entendiendo o intuyendo la mueca del chico y aclaró su garganta.

—Vine a regar la planta que le regaló su madre en la última visita. Estuvo muy pesado con que lo hiciera en su nombre.

Jungkook no se mo creía y entró al departamento para verlo con sus ojos.

—¿Lo ves? —Dijo Namjoon y Jungkook hizo un mohín para tomar la maceta y salir con ella.

—Ey, ¿qué haces?

—M-me la llevo. Yo cuidar-ré de ella.—Dijo cabizbajo saliendo con la planta entre sus brazos.

Namjoon enseguida le mandó el mensaje a Yoongi, quien a esas horas estaba durmiendo  aún .