Capítulo 1

9 0 0
                                    

Un sujeto de cabello abochornado que lograba tapar uno de sus ojos y llevaba una chaqueta de tela sobre un uniforme rudimentario (todas estas cosas de diferentes tonos de azul ) sin contar sus muñequeras de tela y los botones de sus calzados que eran rojos caminaba tranquilamente por las calles de ciudad Malva, en la región de Johto.

Nada parecía fuera de lo normal, se le había informado que llegaría un luchador novato ese mismo día y estaba preparado para enfrentarlo, pero cuando estaba por regresar al gimnasio un estruendo resonó el lugar.

El muchacho volteo alarmado por el ruido y la agitación del lugar, solo para divisar un humo que salía de la punta de la Torre Bellsprout, así que el líder de gimnasio busco, en su bolsillo, una pokeball de la que emergió un Pidgeot en el cual se montó para que lo llevara de inmediato a la zona de la que salia el humo.

Al llegar pudo ver un gran hueco en el techo de madera.

-Oigan! ¿¡Quiénes se supone que son ustedes!?-gritó el justiciero al ver a tres muchachos que reían como desquiciados tras derrotar al Hoothoot de un anciano al que estaban amarrando a una de las vigas de la Torre. Los tres impresentables estaban vestidos con unos trajes completamente negros salvo por un símbolo circular con picas semejante a un sol, con la diferencia que la mitad del astro estaba pintado de negro y había un espiral al medio. A esta indumentaria le acompañaban unas botas y un gorro de latex.

Descendió a la habitación a lomos de Pidgeot y saltó frente a la viga central donde estaba sujeto el señor colocándose de tal manera para poder defenderlo. Falkner volteó a verlo y divisó una herida en una de las piernas del vulnerado, seguramente era obra de uno de los pokémon de los impresentables.

-Oiga anciano ¿Se encuentra bien?-preguntó el chico

-Falkner.respondió el viejo-sí, esto no es nada. Un simple corte como este no detendrá a este vejestorio, muchacho-el humo hizo que el anciano tosiera un poco antes de continuar-Además creo que tienes problemas más importantes de los que concentrarte ahora

Falkner devolvió su atención a la mirada del trío de mocosos que tenían de pokémon un Nidoking, un Electabuzz y un Raticate

Falkner vió esto como un desafío, por lo que decidió usar a sus otros pokémon; Fearow y Swellow, este último originario de Hoenn

El líder de gimnasio escuchó que uno de los vándalos ordenaba un ataque a su pokémon, el Nidoking, pero este dirigió su cuerno corrosivo hacía uno de sus compañeros.

Falkner había sacado a sus mejores pokémon de tipo vuelo para poder acabar con el combate de manera eficiente, pero sin saberlo, el rival tenía un as bajo la manga.

-Vaya, vaya-dijo Falkner con un tono de confianza- Al parecer te salió el tiro por la culata, ese Nidoking no debe obedecerte como para haber utilizado tóxico en–-Otra orden fue gritada por el dueño del Raticate.

El pokémon roedor fue con su cráneo envuelto en un casco de prisma translúcido con un tono púrpura para atacar a Falkner. Antes de impactar en el rostro del líder, Swellow fue velozmente al frente de su entrenador y recibió el golpe, por lo que cayó muy herido tras haber protegido a su entrenador. Acto seguido un par de relámpagos cayeron sobre él y lo debilitaron.

Falkner visualizó estupefacto como su pokémon era derrotado, estaba contra las cuerdas y estaba más que seguro que ningún otro pokémon de su equipo podría hacer frente a sus tres oponentes.

Regresó a su pokémon debilitado y también a Fearow, a Pidgeot estaba a punto de pedirle que se llevará al señor malherido del lugar, pues tampoco podría hacer mucho en batalla, pero en eso sintió algo mojado en su pierna.

La Travesía del MaestroWhere stories live. Discover now