Caprichos del destino

CAPÍTULO 34

- Aaaah~ ahí... Justo ahí Jimin ~~

- Te gusta.

- Sí ~~ aaaah~ si justo asi~~

- Ahora si podrías explicarme ¿cómo es qué te caiste de espaldas? _ preguntó el rubio dando aún masajes en la espalda del pálido.

- Bueno... Me di cuenta que Holly quería jugar un poco, entonces se me ocurrió agarrar su hueso de gomita y arrojarlo por el departamento para que lo atrape _ empiezo a contar mientras recibía el delicioso masaje dado por el rubio _ y no se cómo pero terminé corriendo junto a Holly y en una de esas me resbale y caí fuertemente de espaldas.

- Yoongi por favor ten más cuidado _ dijo con el tono algo preocupado _ cuando me llamaste diciendo que tuviste un accidente me asusté mucho tonto, no vuelvas a asustarme así _ reclamó, tal vez al pálido se le había pasado la mano diciendo que tubo un gran accidente y estaba apunto de morir. Ya que al escuchar eso el rubio dejo todo lo que estaba haciendo en su oficina y decidió correr hasta el departamento que compartía con el pálido a ver cómo estaba. Rogando al cielo que lo mantenga con vida y no lo dejara morir.

- Esta bien, y lo siento por exagerar _ se disculpó algo apenado, y aun que no estaba viendo la cara del rubio directamente, sabía que estaba preocupado por el tono de su voz _ solo quise jugarte una bromita. Disculpa.

- De acuerdo ¿Ya te sientes mejor? _ preguntó sin dejar de dar masajes en la espalda del pálido.

- Si, ya puedes parar y gracias _ se dió la vuelta en la cama una vez que el rubio dejo de darle masajes _ ven échate junto a mi Jimin _ palmeo el espacio junto a él. Cosa que el rubio acato rápidamente y se acomodo junto al pálido el cual lo estrecho entre sus brazos y haciendo que el rubio apoye su cabeza en su pecho _ creo que ya estoy viejo _ dijo soltando una risita.

- Entonces si tú estás viejo quiere decir que yo estoy viejo también _ contestó el rubio levantando la mirada para conectar miradas con el pálido.

- Yo lo digo por qué encerio me dolió la caída Jimin _ habló para luego besar los labios del rubio.

- Y yo lo digo por qué me cansé al correr como loco hasta aquí _ contestó después de separarse del besó.

- ¿Corriste hasta aquí? _ preguntó sorprendido, pensando que tal vez el rubio había corrido tres kilómetros, los cuáles eran la distancia de la oficina del rubio hasta su departamento.

- Obviamente no, pero salí de mi oficina como loco, conduje mi auto como loco y cuando llegue aquí ya que él ascensor tardaba mucho subí las escaleras _ explicó con una sonrisa.

- Ya veo, entonces creo que encerio te metí un sustito _ sonrió avergonzado.

- ¿Un sustito? Min Yoongi casi me matas de un sustote, y espero que no se repita ¿O acaso quieres recordar viejos tiempos? _ preguntó con los ojos entré cerrados, recordando como cuando estaban en la universidad se daban este tipo de bromas entre ellos.

- No había pensado en eso, pero no te preocupes no lo volveré hacer amor _ dijo dando paso a otro beso, cosa que el rubio correspondió rápidamente llevando su mano hacia la espalda del pálido para estar más cerca de este. Luego de unos segundos el beso se volvió más intenso haciendo que el pálido empiece a invadir la cantidad bucal del rubio iniciando una guerra de lenguas para ver quién toma el control dando como ganador al pálido encendiendolo rápidamente al escuchar un gemido ahogado por parte del rubio. Y aún que ambos querían continuar con lo que estaban haciendo tuvieron que parar gracias al sonido del timbre de la puerta siendo tocada.

- ¿Quien podrá ser? _ preguntó el rubio aún con la respiración algo agitada.

- No lo sé, es algo raro que alguien venga a esta hora _ contestó ya que prácticamente eran la once de la noche.

- Voy a abrir yo _ se ofreció el rubio levantándose de la cama. Para luego dirigirse hacia la puerta principal del departamento abriendo directamente.

- ¡Jimin amor volví! _ se escuchó un grito, algo irritante, hasta la habitación donde se encontraba el pálido.

- ¿¡Que mierda!? _ se dijo así mismo el pálido por lo bajo.

¿Acaso era un nuevo problema?