El Gran Heredero

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Luego de salir de los Recesos de las Nubes los Wen viajaron por algunos días ya que hicieron múltiples paradas para revisar el estado de su cuarto príncipe, el cual era algo lamentable.

Wen JiaoHua se encontraba varios kilos por debajo de su peso bajo, por eso los latigazos con la barra disciplinadoras lo habían afectado de sobremanera. Wen Qing hacia lo mejor que podía al no estar en Qishan o en su defecto en Gusu.

A medio camino sin previo aviso Wen Ning cayó desmayado por el uso excesivo de su pobre cultivo, el pequeño chico cayó en picada y fue rescatado a una milésima de estrellarse contra el suelo por ZhuLiu.

-- ¡NingNing! -- Chilló la Mano Derrite Núcleos, QiangDa se sobresalto al ver a su hermano que estuvo a punto de morir y ordenó que el paso se acelera y que los más débiles fueran cargados por los más fuertes.

La cabeza de ZhaoLiang dolía de vez en cuando en puntas muy fuertes, luego de cuatro días llegaron a Qishan y fueron recibidos por los discípulos que llevaron al Cuarto y Quinto Sol al área médica para que fueran atendidos inmediatamente.

Mientras tanto un discípulo de túnicas rojo oscuras se acercó tímidamente a un ZhaoLiang que se afirmaba la cabeza con ambas manos, el ojigris no lo recibió con mucha cordialidad.

-- Mi gran señor -El discípulo se refirió respetuosamente al heredero mientras realizaba una profunda reverencia- Los ancianos Wen mandaron a que le diera un recado...dicen que debe presentarse ante ellos...--

YuZhou suspiro y hablo en tono cansado -- Termina la frase niño --

El chico se encogió y con una voz muy bajita dijo la otra parte del mensaje.
-- Es una orden de efecto inmediato, si se niega será escoltado a la fuerza por discípulos de los ancianos. -- El chico se corrió un poco para revelar que a unos quince metros de ellos, diez personas de túnicas rojizas oscuras se hayaban esperando por una respuesta.

ZhaoLiang enfureció, despacho a cada uno de sus hermanos a sus habitaciones y con pasos resonantes camino muy rápido al ala de los Ancianos, siendo seguido por todo el trayecto por los discípulos de los Ancianos.

Antes de entrar YuZhou libero a ZéSé alertando a las personas detrás de el, y a un paso veloz llegó al centro del salón donde estrelló con fuerza el báculo, llamando la atención de todos los vejestes presentes.

-- ¿¡Quienes se creen para darme un orden!? ¿¡Quienes se creen para amenazarme!?

La mayoría de los ancianos sudaron en frío cuando una mirada enrojecida los escaneaba de pies a cabeza, la mirada podía fácilmente atravesar tu alma, el anciano mayor respondió mientras tembla frenéticamente.

-- Nos has avergonzado ante los Lan, ya nos han llegado las noticias de lo que JiaoHua a hecho. Lo que hiciste no fue algo digno de un príncipe heredero, Wen YuZhou, tu cuarto hermano fue el responsable del error y Lan QiRen solo quería educarlo.

ZéSé mando una gran cantidad de energía resentida, la neblina negra se enrollo en los cuerpos de los vejetes y alejo a los discípulos jóvenes, la energía se condenso en grandes y pesadas cadenas de un rojo escarlata que mantuvo a los ancianos clavados en sus asientos. Quejidos de dolor llegaron a los oídos de YuZhou y este sonrió complacido mientras empezaba a juguetear con su joyeria.

Con un aura intimidante se empezó a pasear por toda la sala tocando descuidadamente todas las cosas, al final tomo un tubo bañado en oro que servia para trasportar las cartas de la secta y lo admiro para luego entablar una conversación unilateral.

-- Primero que nada no he avergonzado a la secta, ya que yo soy la secta -YuZhou realizó una pausa para agregarle drama a la situación- Segundo, nadie más que yo tiene el derecho de decidir un castigo para mis hermanos -Ahora el heredero elevo tres dedos- Tercero no puedes referirte a un príncipe de un reino solo por su nombre de nacimiento, no eres cercano para que te haya dado permiso para nombrar a uno de mis tesoros por su nombre.--