𝘚𝘦𝘨𝘶𝘯𝘥𝘢 𝘷𝘪𝘤𝘵𝘰𝘳𝘪𝘢 ― ┊TPN x Tú ┊ temporada 2

#7

¡Mención (un tanto) explícita de tortura y hechos sangrientos!

Canción opcional:
I Wanna Be Yours ― Arctic Monkeys

Los caballos un tanto extasiados comenzaron a bajar la velocidad por el acercamiento que estábamos teniendo con el pueblo. La gran mayoría de los jinetes ya estaban con una emoción y adrenalina en el interior. Finalmente obtendrían la tan deseosa venganza que rondaba en sus mentes desde el sufrimiento que fue participe en sus vidas.

Treinta y ocho minutos con diecisiete segundos fueron los números que podían indicar la tardanza del refugio al pueblo. No obstante, teniendo a los caballos bien descansados e hidratados su recorrido fue menos tiempo, aunque no tanto para ser precisos. Tan solo habían Sido doce minutos y nueve segundos los que se habían restado durante el largo sendero.

La de cabellera ______, siendo la más adelantada junto al albino de ojos cristalinos, pronto tuvo la fortuna de divisar el tejado de una propiedad en el pueblo, y al segundo, ya pudo observar las demás casas y construcciones que tenía dicho lugar.

Estrujó la rienda con una fuerza leve al recordar a dos pequeños que luego debía rescatar.

Se había prometido mentalmente no encariñarse con esos dos, pero joder... ¡Hasta la veían como una figura maternal apesar de la corta edad que tenía ella! El solo hacer un repaso por sus memorias y encontrar la escena de su escondite con sangre y la desaparición de dos demonios inofensivos a su cargo, el piso y paredes arañadas, y aún más sangre al rededor solo le hacía estremecerse. No por lo que vio, ya que de cierta forma pudo imaginarse lo que había pasado y eso no había sido nada en comparación a las cosas que ya había ejecutado con otros de los seres a los que pronto volvería a torturar.

Pero hubo una vez, que jamás olvidaría.

Fue la primera vez que había capturado a uno de esos seres ella sola luego de semanas de que todos entrenarán para hacerlo. Aquel había Sido el primer demonio que capturaban fuera del laboratorio, y eran mucho más salvajes al estar totalmente hambrientos y sedientos de la sangre y carne humana que ellos llevaban impregnadas. Todos la felicitaron, incluyendo el chico que ama, pero que comenzó a odiar con razones ilógicamente  lógicas apenas hoy. Todo dependía del punto de vista, también.

Ese día... No sé contuvo, y lo destrozó por completo sin sentir remordimiento alguno hasta el día de hoy, en dónde sigue sin arrepentirse de aquel suceso. Cuando en su mente aún pasan los gritos de desesperación de esa cosa no puede evitar sentir satisfacción. Y más sabiendo que el había hecho el inútil intento de tenerla en sus dientes como la presa que era a sus varios ojos. Él, al segundo de verla ya había montado una película de todo lo que le haría y de como disfrutaría la carne de alta calidad que ella portaba.

El disfruto comerla en su imaginación, y ella disfruto despanzurrarlo aún teniendo a la bestia conciente. Definitivamente nunca dejaría de satisfacerla el tan solo recordar sus gritos de agonía y las súplicas que le demandaba por piedad.