Capítulo 1

394 34 5
                                    

Imperio Lee. Armonía, paz, prosperidad, todo esto definía ese maravilloso lugar. El nacimiento de su primer y único hijo se convirtió en la alegría de todos aquellos que servían al imperio. Un omega, hermosos ojos color miel, un cabello tan brillante como el oro, era un hecho, lucía igual a un ángel.

El niño, príncipe heredero a la corona, Felix. A pesar de ser un omega fue entrenado para matar, cazar y gobernar como cualquier alfa. Poseía el maravilloso poder de los Lee, un poder en las feromonas que podían someter a el alfa más fuerte si este estaba al frente. Aun así mostraba una sonrisa refulgente como las gemas.

Tan amable y sencillo, tan carismático y poderoso, Felix era tantas cosas, esas mismas cosas hacían que las personas dudaran de si era un humano en realidad. En su adolescencia conoció a la persona con la que deseaba pasar el resto de su vida. Desde que lo conoció supo que este era su destinado y que lo amaría para siempre. Seo Changbin, el hijo del duque. Fieles siervos del emperador.

Felix vivió sus días dorados, hasta los dieciocho años. Su romance con su alma gemela inició en su fiesta de quince años, su padre no se opuso, pues sabía que ese joven lucía prometedor para su hijo.

Un hermoso romance, caminando sobre algodones y rosas. Donde la lluvia caía como aromatizante para sus narices, y el sol como un pequeño brillo que iluminaba sus ojos. Fue perfecto.
Esos días de oro, cayeron justo en frente de Felix como si de un estampado se tratase. A sus dieciocho años se había comprometido por amor, pero un día antes de su boda presenció la infidelidad de un ser que juraba serle fiel de por vida.

Pero cinco años después se arrepintió de no haber terminado.

Deberías cederle el trono a tu esposo, Felix. Comentó, aquel señor manejó tanta seguridad. Como si pudiese convencer a Felix. Pero no era así, Felix de dieciocho años si hubiese hecho esa tontería con los ojos cerrados. Sin embargo, este Felix que vive constantemente el abandono de su esposo, jamás haría semejante sandez.

—No sé a lo que se refiere, duque. Pero debería tomar en cuenta su manera de dirigirse a mí —Cruzó sus piernas, mientras acomodaba cada anillo de sus dedos. —Espero que sea la última vez que tome una postura tan relajada en mi presencia, que sea la última vez que mi nombre salga de esa boca, no, será la última vez —esparció las feromonas que tanto temían las personas, esas que hacían que se arrodillasen ante él—, porque si escucho otra sugerencia como esa de parte suya, morirá.

Aprovecharse del trono, no era la primera vez que escuchaba una insensatez como esa. Pero no daría su brazo a torcer, su padre entregó los mejores años de su vida para cuidar y mantener la paz de ese lugar que tanto amaba. El emperador confió en su hijo y cedió el trono, su objetivo era entregárselo a Changbin y él convertirse en su consorte, más no lo haría.

Felix había cambiado tanto en personalidad y apariencia. Cambió la forma de su cabello, de uno dorado a púrpura, para recordar que aún era un omega y que su olor era como las uvas. Mientras que su personalidad era como la de un alfa, defendiendo con uñas y dientes lo que le pertenece.

No dormiré contigo esta noche, tengo cosas que hacer —suspiró cansado, mientras relajaba su cuerpo en el sofá de aquella fría alcoba.

Felix sabía que dormiría con aquel omega con olor a jazmín. Ese maldito olor que odio tanto, porque cada vez que besaba a ese que llamaba su esposo podía sentir ese olor en sus labios. Maldita sea, que miserable se sentía por amar a ese tipo de persona, por no poder culparlo y mantenerlo a su lado.

—Haz lo que quieras. Sólo no lo lleves a la fiesta del viernes.

Sería vergonzoso ver como tu esposo sostiene la mano de alguien más en pleno salón de baile.

—Iré con él —concluyó dando a entender que no lo discutiría. Salió de ese lugar esparciendo esas feromonas que ya no provocaban nada en ese omega.

—Entonces no te molestes cuando veas que sostengo la mano de otro alfa, cariño —Susurró.

Entelequia-HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora