Cap. 1

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Fácilmente eran las 3 de la madrugada, nadie lo sabría decir, pero lo último recuerdo que su cerebro guardaba eran las imágenes que sus ámbar retinas grabaron. Todo estaba en un ángulo extraño y las luces de un automóvil cortaban la vista de todo y apenas pudo reconocer a alguien más que se aproximaba. No pudo moverse y lo único que pudo sentir fue el frío y duro pavimento contra su mejilla, calentándose con algo pegajoso, húmedo y tibio mientras su cuerpo se enfriaba y todo se hacía y más oscuro pese a que estaba seguro de mantener los ojos abiertos. La ansiedad le fue tomando conforme su entidad se ahonda en un oscuro abismo cayendo hacia la nada.

Quizá no debió salir ese día, había sido el peor de toda su semana y eso no estaba por mejorar.

Negro... vacío... nada...

De pronto abrió los ojos, no sabía los minutos que transcurrieron, pero lo primero que vio fue sus propias piernas surcadas por una gruesa cuerda que le envolvían por completo. No pudo alcanzarlas o intentar quitárselas con las manos pues no se pudo levantar, moverse o escapar ya que estaba firmemente atado por ésta a una silla.

Jadeó asustado, algo lo enmudeció... Reparando en sus actual estado notó en desespero un parche que unía pegados sus labios. Su pecho se agitó cada vez más apenas pudiendo respirar. Levantó la mirada y sólo descubrió una pared de monitores en azul que iluminaba la oscuridad de esa habitación sin aparentes ventanas.

Reki empezó a temblar de terror, sus ojos se contagiaron en lágrimas. Luchó infructuosamente por soltarse, huir. Fue hasta que oyó una puerta abrirse que se detuvo de todo intento y una nueva fuente de luz le cegó hiriéndole los ojos.

La puerta abierta a la distancia fulminó su visión en un contraste y sólo pudo distinguir a contraluz una sombra remotamente acercarse.

aplaudiendo pausadamente y de modo sarcástico, y pese al terror que le cortaba la sangre Reki se quedó viendo en la urgencia para descubrir al que, presumió, era el culpable de su actual situación.

???: "Hola, mi querido rojito, ¿cómo estás?" Inquirió burlonamente mientras se acercaba rodeando la silla donde tenía a su prisionero.

Esa expresión sólo aumentó el pavor del "rojito" apretándole la boca del estómago. Los fuertes contrastes de las luces no le ayudaron a adivinar la identidad del recién llegado, pero podía suponer de quién se trataba y un ligero escalofrío seguido de un pequeño dolor se hizo presente en su pecho.

No entendía qué estaba pasando. Su cuerpo temblaba, su cabeza dolía, pero lo que más le preocupaba era ese extraño en traje de matador...

Era Adam, se trataba del matador del amor quien lo había secuestrado? pero qué quería él con Reki, ligeramente podría suponerse pero no quería pensar en eso, se negaba, sabía que no le gustaba su presencia y eso era lo que más temía... estar a merced de ese vicioso ser y empezó a temer por su vida.

El rostro de quien había adivinado, oculto entre la luz y la sombra, sonrió al pelirrojo.

A: ¶Mmm viendo esta mirada de terror, no se ve tan desagradable la tercera rueda, creo que lo molestaré aún más, así no se entrometerá más entre mi Eve y yo...¶

Aquella expresión de terror en Reki sólo logró encender al matador, quien se acercó a la parte trasera de la silla y tomó al pelirrojo del cabello dando un brusco tirón hacia atrás.

Adam: "¿Qué sucede?"

Con una voz más gruesa susurró...

Adam: "¿Te comió la lengua el ratón? Hahaha... Seguro te preguntas cómo una basura como tú terminó captando tanto mi atención, ¿no es así?".

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⏰ Last updated: Nov 04, 2023 ⏰

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Querido Tercera Rueda [Editando]Where stories live. Discover now