Capítulo 1:No es posible...¿o si?

133 18 13
                                    

New York.

00:00 horas.

Kila.

Sentada en medio del jardín trasero, el frío me acogía hasta el punto de hacerme temblar, con la laptop reposando sobre mi regazo descargaba unas que otras imágenes agradables a la vista de "El androide 17", durante toda mi niñez fue mi único personaje favorito de toda el anime, los demás me cansaban un poco. Llevaba alrededor de 2 horas sentada afuera, mis ojos ya ardían por tener tanto tiempo la vista clavada en la pantalla del ordenador, era de noche y el clima estaba algo pesado, el sonido de los relámpagos resonaban por toda la zona avisándome que en cualquier momento empezaría una fuerte tormenta eléctrica.

Dispuesta a ir por un vaso de agua me levante dejando la laptop sobre la silla de mimbre, al dar unos cuantos pasos quedando bajo techo, un ruido seco retumbó detrás de mi dando un brinco de sorpresa, me voltee llevando mi vista hacía donde se ori...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Dispuesta a ir por un vaso de agua me levante dejando la laptop sobre la silla de mimbre, al dar unos cuantos pasos quedando bajo techo, un ruido seco retumbó detrás de mi dando un brinco de sorpresa, me voltee llevando mi vista hacía donde se originó el terrible sonido; en su mismo lugar yacía mi laptop expulsando una oscura capa de humo, provocado por lo que parecía ser el impacto de un relámpago.

-¡Joder!. Grité acercándome a mi moribundo ordenador.

Corrí a tomarla entre mis manos, pero una extraña fuerza me impidió llegar expulsándome agresivamente hacía el otro lado del jardín, una luz blanca se hizo presente dejándome ciega por algunos segundos. Aún en el suelo talle mis ojos con los puños intentando aclarar lo borroso de mi visión, al recuperarla por completo noté a una persona no identificada de espaldas hacia mí, posada a un lado de mi propiedad... ¿Podrían tratarse de alucinaciones mías, o quien estaba en frente era nada más ni nada menos que el protagonista de las fotografías que descargue?

-No es posible...- musité estupefacta y a la vez desconcertada.

El pelinegro se volteó mirándome de una forma muy extraña, ¿confundido?, yo también lo estaba, encontrándome totalmente perpleja, no sabía cómo reaccionar o exactamente qué decir.

-¿Quién eres, y dónde estoy? - Cuestionó sin pizca alguna de amabilidad, gélida era su mirada indicándome que estaba en peligro.

-Y-yo...

No logré articular palabra alguna.

Continuará...

Mundos Paralelos...N°17.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora