"La guerra que azotó a la región de Kanto siempre dejó secuelas, eso es innegable. Pero no podemos permitirnos ser débiles, debemos ser fuertes.. Jóvenes que aspiran a ser entrenadores den lo mejor de sí.. Y entonces podremos demostrar a todo el mundo.. ¡Que Kanto es la más poderosa!.. "
Esas fueron las palabras que soltó un joven de cabello rojo por televisión. Esta fue apagada de inmediato por una mujer de cabello negro que a su lado tenía a un ser de color azul, cola de pez y un cuerpo algo mediano para ser algo convencional.
"Vap.. Vap..." del hocico de la criatura azul salieron unas cuantas palabras, la mujer entendió lo que quiso y decir y simplemente asintió.
"Sabes Vaporeon.. Mi hijo admira demasiado a Lance.. Pero su condición me preocupa.. Somos madres de esos dos así que es normal preocuparnos.." dijo con una sonrisa la mujer mientras acariciaba a su compañera. La Vaporeon a su lado recibió las caricias con amor y simplemente trató de relajarse.
Después de aquella platica nos movemos de esa pequeña casa donde se encontraban y pasamos a un enorme edificio en el centro de la ciudad. En el se encontraban varios jóvenes entrando y saliendo con sus Pokémon.. Algo particularmente extraño. De ese mismo lugar salía un niño con un par de parches en los ojos, cabello negro, una camisa de color azul y unos pantalones algo sueltos del color de su cabello. A su lado estaba un pequeño zorro de color café al que denominaba "amiga" y que siempre parecía estar en su hombro.
"¡Ahora que somos parte de los Ace Trainers podemos hacer misiones!.. Mamá se pondrá muy contenta y Vaporeon también.. Cuando ganemos lo de nuestra primera misión iremos los cuatro juntos a comer.. ¿Que te parece?.. " preguntó el niño viendo a su Eevee, quién al escuchar las palabras de su entrenador inmediatamente asintió.
Ambos muchacho y Pokémon comenzaron a caminar por la ciudad azafrán. El chico era ciego y por eso tenía los parches en sus ojos, sin embargo contaba con la ayuda de su amiga Eevee y sobre todo poseía unos prodigiosos oídos que le permitían saber que venía.
"Compermiso.. Voy a pasar.. Permiso.."
Decía el muchacho mientras pasaba al lado de las personas.
En la enorme ciudad se encontraba la compañía Silph, de la cual había salido muestro protagonista. Esta se encargaba de ayudar a los jóvenes aspirantes a ser entrenadores y les proporcionaban una paga, a cambio de que estos se volvieran guardianes oficiales de la región. Tenían el propósito de ayudar a las personas y cumplir los pedidos que le solicitaran. Nuestro protagonista con 13 años logró sacar al fin un permiso para volverse entrenador.
Paso un rato hasta que este llegó a su casa que estaba un poco a las afueras de ciudad Azafrán y fue recibido por su madre.
"Hola hijo.. Me da mucho gusto que volvieras.. ¿Como te fue?.." pregunto la mujer mientras su Vaporeon iba a revisar a la pequeña Eevee del niño.
"Bien mamá, fuimos aceptados y me dijeron que mientras me pueda mover libremente a los alrededores todo bien.." sonrió el niño mientras era llevado de la mano por su mamá.
La mujer sonrió mié tras le preparaba algo de comer a su hijo. Sin que este se diese cuenta comenzó a derramar lágrimas y trató de aguantar los sonidos de su llanto. Ella sabía lo prodigioso que era el oído de su hijo y lo que menos quería era ponerlo triste en estos momentos.
"(Estoy seguro que tu hermana y tu papá estarían orgullosos de lo que has logrado pequeño..)" pensó mié tras derramaba sus lágrimas y Vaporeon junto con Eevee la consolaban sin que Yellow se diera cuenta.
...
"Eres el nuevo.. Yellow.." mencionó una mujer de forma seca.
"Así es.. Soy yo señorita.." hablo con una sonrisa el muchacho mientras se posaba frente a ella.
"Bueno pues.. Sin mas rodeos tienes una misión.. En el dojo de ciudad azafrán hay una plaga de Pokémon que está afectando mucho a los practicantes.. Ve a ayudarlos.." dijo la mujer de forma seria.
"Esta bien ahora mismo voy.. Por cierto me comentaron que me darían mi placa de Ace Trainer cuando.."
"Sisisi aquí tienes niño ahora vete.." dijo la mujer de forma irritada mientras su Abra lanzó la placa a la cara del niño. Con una gran agilidad Yellow tomó la placa.
"¡Muchas gracias!.. ¡Volveré con el reporte!.." grito Yellow con una sonrisa mientras salía corriendo, dejando a la mujer sorprendida por ver como la placa había sido tomada tan fácil.
...
"Malditos Venonat!.. ¡Largo de aquí!.. Ahhh!..." exclamaron algunos artistas marciales mientras trataban de ahuyentar a los Pokémon. Ni siquiera los Machoke o Machop podían hacer algo, ya que estos contaban con Psybeam y no les dejaban hacer algo.
Sin embargo todos voltearon a ver cuando un niño con su Eevee al lado llegó corriendo.
"¡Ace Trainer al rescate!.."exclamo Yellow llegando, sin embargo los karatekas se molestaron con su llegada.
" Largate niño no importa que tengas una placa, no sirve de nada si.. " sus palabras fueron cortadas cuando Yellow había dado una orden.
" Eevee usa Shadow Ball ".. Yellow dio la orden y varias bolas de energía oscura salieron de su hocico. Estas impactaron a los Venonat los cuales se sintieron irritados al sentir la energía fantasmal, así que se retiraron.
"Wow.. Mira ese niño lo logró.. Parece débil pero Silph lo mando ya que tiene un ataque de tipo fantasma.." Susurro uno de los altos cargos del Dojo.
Todo parecía haber terminado sin embargo uno de los Venonat estaba molesto y comenzó a evolucionar. Yellow conocía ese sonido y se colocó en una pose mientras su Eevee se preparaba.
" VENOMOTH".. El fuerte zumbido del nombre se escucho mientras todos los Karatekas eran alzados con su poder psíquico.
Yellow gruñó con molestia al no saber que hacer, así que simplemente decidió luchar para poder lograr detener esta difícil situación..
----
¿Podrá Yellow detener al Venomoth?..
