Metzi pov.
No pude dormir pensando en todo lo qué pasó en la noche de ayer, recordando ese beso que me tiene hecha mierda en estos momentos.
Estaba tirada en mi cama con los nuevos cortes que había hecho durante estas largas horas, gracias al enojo y la tristeza que me causaba todo este conflicto.
Realmente no entiendo, no entiendo porque me beso.
¿Ahora como se supone qué lo vea a la cara? Después de eso estoy confundida, ¿Realmente le gusto? ¿Me odia? ¿Era necesario ese beso? ¿Porque? Mi mente no me deja en paz.
Mierda, olvide que hoy tenemos que viajar para un concierto que tienen los chicos.
Si tan solo no fuera su estilista, ahora mismo estaría tranquilamente cuidando la casa donde los conocí por primera vez sin sufrir por amor.
Ahora mismo estoy considerando dejar mi trabajo, pero eso es difícil ya que estaría renunciando a mi sueño de toda la vida.
De un momento a otro siento como abren la puerta principal de mi apartamento, supe de inmediato que era Jonathan ya que él tenía las llaves.
Estaba tirada hecha mierda, con los antebrazos con sangre seca, con los ojos hinchados y un poco rojos de tanto llorar.
Ahora mismo me importaba un carajo que Jonathan o quizás alguien más me encontrara en este estado, de todos modos Jonathan tenia claro lo que me pasaba así que ya no sería algo muy sorprendente para el.
Sentí pasos acercarse a mi habitación, vamos a jugarle una pequeña broma a Jonathan.
Lo único que necesitaba era cerrar mis ojos y no abrirlos, fácil.
-Metzi- dijo Jonathan al entrar en mi habitación, pero descarto en seguida lo que iba a decir después de eso y sentí como corría hacía mi, Dios Jonathan de verdad perdóname por esto.
-¡Metzi! Mierda mierda mierda...¡Prometiste no volver a hacerlo!- grito y se acerco a mi corriendo, mierda se me había olvidado eso.
-¡Metzi despierta! Oh dios por favor ¡Despierta!- dijo desesperado con su voz entrecortada, ahora me estaba sintiendo pésimo.
-¡Bu!- dije abriendo mis ojos y mirando a Jonathan, este pego un gran susto.
-¡Mierda Metzi!- gritó asustado y a la vez enojado, como me encanta asustar a este hijo de puta.
-No vuelvas a asustarme con mierdas como estas
-Tranquilo, solo aproveche- en seguida Jonathan cambio su cara a una seria, fue mala idea decir eso...
-¿Son reales?- preguntó en seguida aún con su cara seria, yo no dije ni una sola palabra y asentí, de todos modos no serviría de nada negarlo.
-Dios Metzi, ¿Te acuerdas de lo qué hablamos sobre esto?- dijo con cierto tono de molestia, yo solo me quede sentada escuchando su regaño.
(....)
Después de un largo regaño de parte de Jonathan y una dolorosa pero necesaria curadita, finalmente terminamos.
Mis brazos ardían, pero ya estaba acostumbrada.
-Bien, arreglate tenemos que viajar, cuando termines sal, te esperaremos fuera del departamento- dijo y se fue, tal vez para avisar a los demás.
Me arregle y ordene mis cosas, ya que no había dormido el sueño estaba empezando a hacer efecto.
Como pude baje mis cosas saliendo del departamento encontrándome con el bus en el que siempre viajamos, guardando mis cosas y subiendo en el.
