EL SUDOR FRÍO SE DESLIZABA por su frente mientras Elizabeth sentía su estómago revolverse;su respiración estaba entrecortada y varias lágrimas escapaban de sus ojos.
Dirigió su vista a la cama de al lado,Daphne dormía plácidamente con el cabello rubio alborotado.Después miro su reloj dándose cuenta de que eran apenas las cuatro de la mañana.
Suspirando se levantó silenciosamente,lo que menos quería era que Daphne despertara y la cuestionara sobre el porqué estaba llorando.Afortunadamente la pelirroja tenía suerte de que la habitación que compartía con Daphne solo era habitada por ellas dos.
Se dirigió fuera de su sala común abrazándose a sí misma.Salió con cuidado,cuando llegó al pasillo más solitario donde sabía que nadie la encontraría se recargó en la pared mientras sentía sus ojos humedecerse nuevamente.
Elizabeth lloraba y era tan desgarradora la manera en la que la hacía porque ella no estaba acostumbrada a llorar.
—¿Potter?
Esa voz hizo que Elizabeth levantara rápidamente la vista.Draco hizo una mueca al ver su rostro con rastro de lágrimas.
—Largo,Malfoy.-dijo para después recargar su cabeza en sus piernas.
Draco frunció el ceño al verla llorar.Había observado por bastante tiempo a Elizabeth Potter como para saber que ella no lloraba por cualquier cosa.
—¿Porque lloras?-pregunto recargándose al lado de la Potter.
—No es de tu incumbencia.-contestó hostil Elizabeth.
—¿Sabes que cualquier prefecto te puede ver aquí verdad?-pregunto mirándola de reojo- El que estes llorando no te salvará del castigo.
Elizabeth suspiro ya harta.En las últimas semanas Draco no hacia otra cosa que molestarla y tratarla bien.Sus cambios de humor estresaban a Elizabeth pues un día podría tratarla bien y al otro ni la miraría.
—Entonces ve de chismoso como siempre,Malfoy.-Elizabeth le dio una sonrisa sarcástica-Es tu especialidad,¿No?Idiota.
Elizabeth se alejo a pasó rápido perdiéndose de la vista del platinado.Y fue en ese momento que Draco lo noto,Elizabeth estaba llorando,si,pero sus manos habían estado temblando durante todo el rato.
Como si estuviera fuera de si.
Por otro lado,Elizabeth suspiraba mientras se metía de nuevo en su cama.
