Embarazada de un Mafioso ©

ℂ𝕒𝕡 𝟘𝟙. 𝔼𝕝 𝕓𝕒𝕣

Capítulo uno.

Isabel Harrison.

--¿Qué quieres?-- le pregunto cuando me percato de la manera en la que me mira.

--¿Puedes parar de leer y escribir, y prestarme atención por un segundo?

--Lo siento, pero no puedo, tengo que terminar de editar este libro para que vayamos analizando la fecha de publicación-- exclamo, mientras empiezo a corregir una que otras palabras con faltas ortográficas.

--Por favor-- suplica. --Solo será un segundo-- suspiro derrotada.

Cierro mi laptop, y volteo mi mirada hacia ella.--Tienes dos minutos, necesito irme y primero debo terminar de editar ese capítulo.

--Odio los capítulos largos-- exclama, mientras estruja su cara con frustración, como si le cansara de tan solo verme leerlos.

--Yo no los odio, pero sí odio editarlos-- suelta una risa.

--Bueno... es que-- se pega a mi cuerpo y me abraza efusivamente, mientras acaricia mi cabello rápidamente.

--Mmmm... ¿Qué es lo que quieres?-- le pregunto con los ojos entrecerrados.

Ya me va a manipular, lo sospecho.

--Mi exnovio ahora trabaja en un bar, no como barman-- aclara rápidamente, mientras se separa lentamente de mí, dejando mi cabello rizado, un poco más despeinado de lo que ya estaba.

--¿Cómo gerente?-- pregunto con ironía.

--Mmmm... ¿Nop? No lo creo-- menea su cabeza ligeramente con una mueca en sus facciones faciales.

--¿No me vas a pedir un consejo donde te digas que te alejes de ese tóxico que no está metido en buena cosa, para luego ignorarlo completamente? ¿O si?-- pregunto ya cansada de lo mismo.

Una novela sin fin.

--Nop-- responde, mientras bebe un sorbo de su jugo de naranja. --Pero... quiero que te pongas un vestido que combine con tus hermosos ojos color ámbar, y acompañes a tu amiga a ir al bar.

--¿Y por qué los acompañaría a su cita?-- pregunto confundida.

--Porque tienes que salvarme si las cosas se tornan un tanto... incómodas-- mueve su mano de manera exagerada, como lo hace siempre que está nerviosa. --No es como si vas a estar pegada a nosotros-- la interrumpo.

--Eso sería mal tercio-- exclamo, mientras le quito su bebida y me bebo un sorbo.

--Sí, pero tampoco quiero que estés tan... separada, o sea-- suspira. --No sé si me entiendas-- la interrumpo, mientras abro mi computadora nuevamente.

--Entiendo lo que dices, Valentina.

--Que bueno porque-- la interrumpo.

--Pero no puedo-- empiezo a corregir el último párrafo.

En serio, ¿Qué es lo que está pasando? ¿Por qué no saben que ya no es correcto que se escriba "ésta", en ninguna ocasión?.

--¿Me estás jodiendo?-- me pregunta enojada.

--Lo siento mucho, Valentina. Oye, yo te amo, te quiero mucho, eres mi mejor amiga, me gusta pasar tiempo contigo, pero hoy no puedo, mi prometido está de cumpleaños-- exclamo, mientras cierro mi laptop y guardo todas mis cosas.

--Por favor-- suplica poniendo ojos de cachorro abandonado.

--Ay, esos ojos pongo cuando tengo hambre y quiero que Max me compre pizza-- exclamo con una sonrisa que borro rápidamente al ver su cara.

¿En serio, cómo logra hacer que sienta pena tan rápido?.

Suspiro, mientras acaricio su rostro. --Tengo que irme, ya sabes... tengo que decorar la fiesta sorpresa, pero si decides no ir al bar, estás invitada, lo sabes-- aún no quita esa mirada y esa cara de tristeza. --Si tan solo hubiera sido otro día...

***

El camino a casa fue corto, pero aproveché cada segundo pensando en cada detalle de la fiesta...

Debía quedar perfecto... él merecía que fuera así, es tan lindo...

Por suerte, mi madre prometió venir a ayudarme con los preparativos, así que debe estar a punto de llegar.

Abro la puerta, y entro lentamente a mi casa.

Quizás necesite descansar un poco antes de preparar todo.

Suelto un suspiro, mientras aviento mis zapatos, y después los recojo para llevarlos a mi closet.

Abro la puerta y mi cara se desencaja totalmente.

Es mi madre y mi prometido en mi cama haciendo lo indebidamente delicioso.

Ellos paran rápidamente, y me miran con sorpresa, al parecer pensaron que nunca los descubrirían, aunque así hubiera sido si no hubiera decidido venir temprano del trabajo para adelantar algunas cosas.

--Mi amor, yo-- Alex trata de acercarse a mí, pero yo me alejo.

--Váyanse ambos de mi casa, ahora-- exclamo con firmeza, sin derramar ninguna lágrima.

--Hija, él me sedujo-- empieza a decir mi mamá, pero es interrumpida por Alex.

--Eso no es cierto, mi amor, yo... ella fue quien-- lo interrumpo.

--¿Acaso te violó, gil?-- le pregunto con ironía antes de soltar una risa amarga.

--No, pero-- lo interrumpo.

--Entonces váyanse ambos y olviden que existo-- le pido. --Y tú, madre, que lejos llegas por una verga, ojalá que nunca necesites algo más que eso-- tomo su ropa y se las aviento a ambos.

--Mi amor, yo... piensa en nosotros, en todo lo que hemos vivido, ¿Acaso todo terminará porque cometí este error?-- me pregunta, mientras trata de abrazarme sin ocultar su desnudez.

--Pudiste no haberlo destruido-- exclamo de manera fría. --Sabes bien que esto no es un error.

--Pero yo te amo-- derrama algunas lágrimas falsas, pero no me convences

--Creo que estás confundido, si realmente me amaras, no hubiera hecho esto.

Y es cuando mi rabia aumenta al pensar claramente en lo que está pasando...

Me fue infiel... con mi madre.

Y no lo puedo evitar, le doy una cachetada a ambos y los aviento fuera de mi casa, aun desnudos.

No lloraré, esta situación de tan poco valor, realmente no lo amerita.

Solo me siento en mi sofá, y llamo a mi mejor amiga. --Sí...?-- responde al primer tono.

--¿Dónde queda el bar?-- le pregunto.

Nota de autor: Espero que les haya gustado el primer capítulo (Esta pequeña introducción a la historia) Y si no, pues lo siento mucho por haber hecho que pierdas tu tiempo, pero al final esta disculpa no arregla nada, así que solo ódiame. __.

Si todavía estás interesado y te gusta el dolor y quedar sin estabilidad emocional... entonces te diré la fecha de la próxima actualización.

𝕊𝕖𝕘𝕦𝕟𝕕𝕠 𝕔𝕒𝕡𝕚́𝕥𝕦𝕝𝕠: 𝟚𝟚/𝟘𝟟/𝟚𝟘𝟚𝟚

¡Adiósitos! :D