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La tripulación, conformada por 9 miembros, llamada los Mugiwaras, se encontraban, solo 6 de esos 9 miembros, en la cocina del barco. Ellos junto a su "invitado" algo . . . "Particular"
La arqueóloga había entrado a la cocina, ahora eran 7 miembros y su "invitado". En el instante en el que los demás vieron a la peli-negra entrar por la puerta, la llenaron de preguntas por el estado de sus nakama
Todos sabían que Robin no dejaría a ningún nakama, sin antes darle, aunque sea, un poco de apoyo y una sonrisa tal dulce como sus palabras
Y dejando de lado, un faltaban 2 miembros en esa gran y cuidada cocina. Y aquellos dos, se encontraban, muy avergonzados, escondidos en alguna parte del barco
— Robin, ¿pudiste hablar con sanji-kun? — pregunto la peli-naranja, ella sabía que la fémina no dejaría así sin más a un nakama —
— No, Nami-san. El no dijo mucho —respondió con frustración de no poder ayudar un poco más a su nakama —
— No te sientas mal, Robin — dijo viendo la frustración en la peli-negra — Sanji solo lo quiere que nos preocupemos de más. Y además tarde o temprano nos contará lo que pasó — menciono par levantar los ánimos de la peli-negra y todos lo demás presentes —
— Usopp-san tiene razón — el músico de igual manera se sumaba a la conversación — No hay porque preocuparse, además Sanji-san no contará todo cuando esté listo —dijo dando ánimos para alegrar un poco el ambiente —
Mientras ellos hablaban los otros 3 participantes, y su invitado, escuchaban en silencio la conversación de los otros 4.
Tenían mucha hambre para opinar, y cuando digo tenían me refiero a que, él capitan tenía mucha hambre. Mientras el pequeño reno y el hombre de acero se aseguraban de que, el antes mencionado, no les robara su comida.
