¿Quieres ir al bosque el viernes?

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Nos levantamos y fuimos corriendo hacia la caravana. Steve comenzó a conducir. Nancy, Robin y él se cambiaron de ropa a una más cómoda para ir a matar a Vecna. Max, Dustin y Lucas se pusieron muchas capas por encima y tenían las lanzas y las tapas de basura con clavos que habíamos preparado.

El silencio habitaba la caravana. Lo único que podíamos escuchar era el sonido del propio coche en la acarretera.

Sujeté la mano de _________. Tenía miedo.

Llegamos a la casa de Victor. Erica, _________ y yo bajamos de la caravana.
Había un coche abandonado que dudaba si funcionaba, una pelota desinflada y árboles a su alrededor.

Caminamos hacia la casa y nos detuvimos para observarla unos metros antes. Los tres teníamos unas lámparas con una luz azul en las manos.

Nos adentramos a la casa y un aire frío recorrió nuestro cuerpo. _________ subió a la parte de arriba de la casa. Erica y yo simplemente caminábamos por el resto de la casa con las lámparas encendidas para asegurarnos exactamente dónde estaba.

Vino hacia mí y me enseñó una libreta con un mensaje. "He encontrado a Vecna". Decía.

Nos miramos. La chica se fue al lugar donde había encontrado a aquel monstruo y yo subí a por __________. Se giró con la luz en la mano y me miró. Hice una señal con la cabeza para que bajara. Asintió y bajamos lo más sigiloso posible.

Llegamos al lugar que nos dijo Erica. La chica y yo nos quedamos en la puerta pero _________ entró a aquella habitación.
Erica había dejado su lámpara en medio del lugar y se apagaba y encendía sin parar.

Erica escribió algo en la libreta y me lo enseñó. "¿Fase uno?".

Asentí y sin pensarlo dos veces, la chica se fue a aquel parque lo más rápido posible.

_________ y yo nos fuimos a otra habitación esperando la señal de Erica.

Podía escuchar en voz baja la canción que tenía _________ en sus cascos. No podía dejar de mirarla. Ella se dió cuenta. Agarró la libreta y escribió algo. "Hola". Decía. La chica sonrió y yo hice lo mismo.

Agarré la mía y escribí. "Hola". Respondí.

"Me alegro de que estés aquí". Me mostró sonriendo.

"Yo también". Contesté.

La chica rodó los ojos con una sonrisa. Estar aquí no era algo bueno, pero no me importaba en ese momento.

Pasé la hoja de mi libreta y escribí algo.

"¿Quieres ir al bosque el viernes?". - Pregunté.

Comenzó a escribir algo. Me acerqué un poco para verlo pero no me dejó y su agarró su libreta para que no pudiera verlo.

Me lo enseñó. Éramos nosotros sentados en el banco que había en el bosque. Sonreímos. De repente una luz comenzó a brillar. Era Erica. Dejamos las libretas a un lado y nos acercamos un poco a la ventana para verlo. Agarré mi linterna y la encendí y la apagué para que viera que ví su mensaje. Apagamos las linternas y Erica dió el aviso.

_________ y yo nos miramos. Caminamos lentamente hacia la lámpara. Llegamos. Me quedé en la puerta pero ella avanzó un poco más. Se giró y me miró. Volvió a observar la luz. Suspiró, se quitó los cascos y apagó la música.

- ¡Eh!, ¡cabronazo!, estoy aquí. He parado la música. Basta de juegos. - Hubo silencio. - ¿Me has oído?. ¿¡A qué estás esperando, eh!?. ¡Vamos!, ¿¡aún me quieres o no!?.

La lámpara que dejó Erica se apagó y se fue a la lámpara que tenía _________. Se fue lentamente hacia atrás. Nos miramos y asentimos. Dejé mi lámpara en el suelo. Comenzamos a subir las escaleras para llegar al desván.

MI RARITO | Eddie Munson y tú Where stories live. Discover now