21. El amor de mi vida

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Emma

Son las ocho menos cuarto, estoy en el salón de casa de mis padres con un precioso vestido azul claro, perfectamente maquillada y esperando a que Lis y Kate pasen a buscarme. A las ocho debemos estar en el instituto para la fiesta. Estoy convencida de que quiero ir y pasarlo bien con mis amigas, pero a medida que se acerca la hora, mis nervios van en aumento.

Las chicas llegan, me despido de mis padres y salgo de casa. En el coche, de camino al instituto, Lis intenta hablar de cualquier cosa para ayudarme a tranquilizarme. Le agradezco el gesto, pero no hay nada que pueda hacer que deje mis nervios a un lado. Tal vez un buen gin-tonic. Es posible que beba uno, o dos, o tres, ya veremos.

Llegamos al sitio que llevaba diez años sin pisar, aparcamos cerca de la puerta y nos dirigimos al interior del edificio. La cena y la posterior fiesta van a ser en el gimnasio, igual que el día de nuestra graduación. Además, todo está decorado como aquella noche, cosa que hace que mis nervios se disparen y los malos recuerdos se acumulen en mi cabeza. Lis me coge la mano.

- ¿Estás bien, Em? Si quieres, podemos irnos a otro sitio, cenar tranquilas y emborracharnos en cualquier sitio.

- Estoy bien, de verdad. Necesito hacer esto - cojo aire y me dirijo a la mesa que nos han asignado.

De momento solo somos nosotras tres junto con Aaron y Josh que acaban de llegar. Hay un par de sillas más, pero no sabemos para quien son. Estamos un rato hablando cuando aparece una chica junto con un hombre muy alto. Me quedo mirándola y enseguida me doy cuenta de que es Anne, nuestra amiga del instituto a la que no veíamos desde la graduación.

- Madre mía, ¡Anne! - la abrazo con fuerza - ¡Cuánto tiempo! Estás genial.

- Em, me alegro muchísimo de verte, estás igual de guapa que siempre - me sonríe con dulzura - Te presento a Robert, mi marido - señala al hombre que la acompaña.

- Vaya, ¡estás casada! Me alegro mucho por vosotros - le doy la mano a Robert - Encantada de conocerte.

- Igualmente, Emma. Anne me ha hablado de ti y de una tal Lis.

- Pues mira tu por donde, está sentada ahí - le hago un gesto a mi amiga para que venga a saludar - Lis, es Anne y su marido Robert.

- ¡Dios mío, Anne! - Lis la abraza con fuerza - Estás estupenda y casada. Joder, CASADA, ¡qué locura!

- No has cambiado en nada, Lis - ríe Anne.

Nos sentamos todos en nuestros sitios sin dejar de hablar ni un solo momento, tenemos mucho que contarnos. Anne nos explica que estudió en California medicina y allí conoció a Robert. Se casaron al poco tiempo de acabar la carrera y son muy felices juntos. La verdad es que hacen una pareja estupenda.

La cena empieza y me lo estoy pasando de maravilla. Me alegro muchísimo de haber venido, de haberme reencontrado con Anne. Justo cuando hemos terminado con los postres, una rubia embutida en un vestido rojo se acerca a nuestra mesa contoneándose. Gabriella.

- La mesa de los frikis - dice a modo de saludo - Es una pena que tu también estés aquí, Aaron, pero te lo buscaste solito.

- ¿Quién es esta idiota? - pregunta Josh riéndose.

- Gabriella Evans - lo mira con desprecio - No te voy a preguntar quien eres porque no me interesa. Solo he venido a ver como les va a mis perdedoras favoritas - nos mira a Lis y a mí.

- Pues chica, hasta que has llegado de maravilla, pero lo has tenido que estropear - responde Lis, aunque Gabriella la ignora y se dirige a mí.

- ¿No me vas a saludar, Emma? - me dice riéndose con maldad - ¿O es que esperabas que viniera otra persona a hablar contigo? Tal vez un chico alto y guapo de ojos azules que está sentado a mi lado en aquella mesa del fondo - bajo la mirada a mis manos - Eres patética, siempre lo has sido - no sé el motivo, pero me levanto de la mesa y la miro fijamente.

El amor... eres tú  #PGP2022Where stories live. Discover now