Draugune: Amistad Del Pasado.

Capítulo 10: Pacto de amistad pt.1

Mientras que los adultos hablaban en la oficina, los niños esperaban dentro del establecimiento. Comenzaba a aburrirse, e incluso a cada uno les gruñe el estómago.

— Ay, que hambre...

— Yo también... — dijo Ryujii luego que metió sus manos en el bolsillo hasta que encontró una barrita; recordaba que lo había recibido por parte de la vendedora —¿ Y eso? 

— Ah, ya me acordé de las barritas  — dijo mientras sacaba la suya — Son barritas de Nanaimo, te va a encantar, por lo mientras va ser como un tentempié.... 

— Ok...  — Abre el paquete y comienza a probarlo dándole un mordisco — mmm esta delicioso... — miro a su amigo quien tiene una triste mirada, eso le preocupaba — ¿Qué tienes, Remy?

— No es... nada... es que... — Estrujaba la barrita sin abrir el empaque — hace tiempo, mi mamá me hacía barritas de Nanaimo casera para mi, ya será en el día de mi cumpleaños o cualquier momento como... después de cenar... — Comenzaba a hablar entrecortado.

— Este... ¿Qué paso con tu mamá? ¿Dónde esta ella? — Preguntaba pero no tenia ni idea lo que Rem le iba a responder. 

— Ella... Murió Hace mucho tiempo... cuando... — En eso sus ojos comienza a llenarse de lagrimas — Tenia 4 años... creí que ella me abandono... 

— Ay no... — Dijo el asiático de forma apenada, en eso se levanta de su asiento y se puso al frente para hacer una reverencia en el suelo mientras se disculpaba — Lo lamento mucho, no fue mi intención de preguntártelo, no lo sabia... Perdón.

— Oye Ryujii... tranquilo... ¡No hagas eso!  — Avergonzado luego se puso de pie para levantarlo — Tu perdóname por...  —  No terminaba de hablar, ya que ambos adultos salieron de la oficina; Parece que ya tomaron un acuerdo.

— Niños... — dijo el entrenador llamando la atención de ambos niños — Ya hable con tu padre, Ryujii y esta de acuerdo que tu también vas a entrenar con nosotros... — Al decir eso, ambos niños comenzaron a celebrar de alegría.

— Muchísimas gracias, señor... hare lo mejor que pueda señor...— Dijo el mestizo mientras hacia reverencia como agradecimiento. 

— Creo que ya debes dejar de hacer reverencia, hijo... — Dijo Michael mientras le acariciaba el cabello azabache, en eso, se percataba la mirada del otro niño — ¿Todo bien, Rembrandt?

— Ah, si...  —Luego vio el reloj de pared, eso lo puso nervioso — Ya es tardísimo, tengo que irme a mi casa... 

— Este... ¿No te gustaría que te lleve mi papá? 

— No te preocupes, Ryujii... puedo ir solito, además tengo que alimentar a mis mascotas... Nos vemos mañana  — Dijo mientras se dirigía a la puerta con prisa para salir.

— ¿Siempre es asi ese niño? — dijo MIchael con un tono de preocupación al entrenador, luego miraba a Ryujii cómo también le preocupa.

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Ya que salieron del lugar, Michael y Ryujii se subieron al auto para ir a su próximo destino; durante el camino, el papá le preguntaba... ¿Cómo le fue en su primer día de clases?... A lo que el menor le responde con un...

— ¡Yokatta ne, otōsan! — se había expresado en su idioma natal a lo que el pequeño se dió cuenta de su error — Perdón... Quise decir...

— No te preocupes, hijo... — dijo en el idioma japonés con dificultad sin quitar la vista del parabrisas — puedes expresarte en cualquier idioma si estamos en familia o... Talvez una conversación en privado...