⟨ 𝙍𝘼𝙈𝙀́ ⟩ chainsaw man

𝗮𝗸𝗶 𝗵𝗮𝘆𝗮𝗸𝗮𝘄𝗮 › strange kiss.

Dos jóvenes se encontraban en una sala, esperando por una nueva misión por parte de los de arriba. Era de buena mañana así que la chica decidió ir a una máquina para tomarse un café y tener algo en su estómago, no podía ir a hacer una misión sin estar algo llena.

-Ten.- extendió su mano para darle el otro café al más alto, pensó que tal vez él tampoco había desayunado nada al levantarse. Aki la miró, luego miró lo que traía en su mano y procedió a agarrarlo.

-Gracias, no hacía falta.- le dedicó una simple sonrisa agradecido, debía decir que ese café estaba ardiendo, si no llega a ser porque es invierno posiblemente hubiera tirado aquél vaso de plástico por reflejo al estar tan caliente. Quisieron ponerse cómodos así que se sentaron en un sofá de cuero negro que estaba en esa sala de espera, lo único que se podía escuchar en esa sala eran los sorbidos de ellos dos al beber su café, solo había silencio, aunque no era uno incómodo. Por una parte estaba Megumi, que simplemente estaba en silencio porque es el tipo de persona que no habla de buena mañana, y sabía que a Aki le gustaba la tranquilidad y no tenía mucha en casa que digamos, no quería molestarlo. Por otro lado estaba Aki, que simplemente era él, no hablaba mucho y disfrutaba del silencio, pero no solo era eso. Había algo con Megumi que le gustaba, y era que con ella estar en silencio era cómodo, algo que tal vez con aquellos dos rubios era algo imposible, pero aún así cuando estaban todos en silencio no era lo mismo que cuando lo estaba a solas con la chica que tenía a su lado.

Pasaban los minutos y seguían esperando, Aki ya agobiado de estar esperando se levantó y se acercó a una ventana, después sacó una caja de su bolsillo y la abrió, sacando un cigarro que colocó en su boca para después encenderlo con su mechero.

-¿No crees que es un poco raro, por no decir malo, fumar de buena mañana después de un café?- se acercó Megumi con calma hasta apoyar su espalda en el ventanal, mirando al chico mientras se ponía a su lado, él solo la miró y sacó el cigarro de su boca soltando el humo.

-Supongo que sí.

La más baja rió, le causaba gracia su indiferencia, ignorando el hecho de que también le preocupaba su salud. Aki solo era un chico con apenas 19 años, por supuesto que tenía el derecho de hacer lo que quiera, ya no solo por el hecho de que sea mayor de edad, es su vida al fin y al cabo. Pero eso no quitaba que realmente le preocupaba y no quería que le ocurriera nada malo a aquel chico.

-Y... ¿A qué sabe para qué te guste tanto fumártelo cada día?- ella en su vida había probado el tabaco, y tampoco tenía pensamiento de hacerlo, simplemente con que le echen un poco de humo ya le daban ganas de vomitar y ni hablemos de toser, odiaba ese olor.

-Mmm, no sé.- volvió a soltar el humo por una pequeña ventana que estaba abierta, y dejó el cigarro en el cenicero. Acto seguido dirigió su mirada a la de Megumi, la cual estaba alucinada con lo bien que se veía Aki haciendo eso. Aseguraba que si otra persona hiciera eso mismo que hacía él le daría repulsión, pero con él era diferente.-¿Tienes curiosidad?

Después de escuchar aquella pregunta frunció su ceño, confundida. En verdad tenía curiosidad, pero no esa curiosidad de querer probarlo, ni de loca. Aunque por la manera en que lo dijo y al haber dejado el cigarro en el cenicero no creyó que fuera a darle de aquel cigarro para probar, así que pensó que se lo describiría.

-Tal vez.

El chico sonrió mirándola en silencio, se quedó así unos segundos hasta que decidió bajar la mirada para agarrar el cigarro, ella lo miró subiendo una ceja, si pensaba darle el cigarro lo tenía claro, no pensaba probarlo. Pero en vez de eso simplemente lo apagó, y la volvió a mirar, con una mirada tan penetrante que la chica pensaba que se le saldría el corazón del pecho. ¿Y es qué cómo no hacerlo? Con esos ojos azules tan preciosos, era fácil derretirse por alguien así, no solo por el color, era por su mirada, tan penetrante y profunda, tan intimidante, hasta parecía que pudiera leerte la mente.

-La verdad, no sabría cómo describirlo.- se acercó a paso lento a Megumi, hasta quedar frente a ella. Era graciosa la diferencia de altura, ya que con Aki midiendo 1'85 cualquiera era más bajo que él, ella simplemente le llegaba por el hombro, cosa que le parecía tierna al chico.-Pero la verdad, no te pierdes nada, es asqueroso.

-Me dejas con más curiosidad, si tan asqueroso dices que es, ¿Por qué sigues fumando?- la más baja comenzó a ponerse más nerviosa, realmente creía que se le saldría el corazón, y es que el chico pasó un mechón de ella por detrás de su oreja. Se quedaron mirando fijamente por unos segundos, Megumi no sabía ni cómo le estaba aguantando la mirada, pero se sentía orgullosa porque nunca habría imaginado conseguir eso.

Entonces poco a poco el chico se inclinó hacia ella, hasta quedar cara a cara, notando sus respiraciones. Desde ahí ella pudo apreciar la mezcla del olor del café y tabaco que tenía Aki, era desagradable pero a la vez adictivo, no sabía porqué. En cambio él pudo apreciar el olor de Megumi, olía tan bien, su colonia de frutas del bosque se notaba y adoraba ese olor, aunque también podía notar ese pequeño olor al café que tomó anteriormente. Eran tan diferentes, y eso lo volvía loco. Después de estar un rato aguantando la mirada y descifrando los olores de cada uno, fue cuando él decidió acortar la distancia entre ellos dos. Un beso lento, pero no corto, Aki puso una de sus manos en la nuca de la chica para profundizar el beso, mientras su otra mano se encontraba su espalda baja. Megumi por otro lado simplemente mantenía sus manos en el cuello del chico, aún asimilando lo que estaba ocurriendo, hasta que después de unos segundos se armó de valor y comenzó a subir su mano para llegar a la nuca del mayor, acariciando así su cabello, con algo de vergüenza.

Cuando se separaron de aquel beso siguieron con sus caras cerca del otro, la chica con su cara algo roja y sin asimilar aún del todo lo ocurrido, mientras que él simplemente sonreía mirándola con cariño, aunque seguía siendo su típica mirada penetrante y profunda.

-¿Entonces...- habló bajo, solo para que él y ella pudieran escucharlo.-quité tu curiosidad?

-Asqueroso.- le dirigió una mirada y sonrisa burlesca, el chico rió un poco ante su respuesta alejándose de la cercanía de ella. Megumi solo pensaba en aquel beso, no iba a negar que fue genial, pero aquel sabor... Asqueroso, simplemente asqueroso. Podía confirmar que odiaba el tabaco, pero si besar al chico conllevaba saborear esa cosa asquerosa, entonces estaba segura que lo haría de nuevo.- Pero volvería a probarlo solo si es de esta manera.

Aki que miraba el suelo sonrió al escuchar eso, levantando su mirada para enfrentarla.

-Asqueroso pero sigues queriendo probarlo.

-Lo mismo podría decir de ti, sigues fumando aún diciendo que es "asqueroso".- se acercó al chico, cruzándose de brazos.

-Si eso significa que podré besarte cuántas veces quiera, lo seguiré haciendo.

Y ahí, justamente ahí fue cuando Megumi perdió toda valentía que tenía. El mayor tenía un gran poder sobre ella, con unas simples palabras podía conseguir eso. Aki tenía pensado volver a besarla, y estaban apunto, de no ser porque los de arriba por fin decidieron presentarse a dar la nueva misión, entonces tuvieron que separarse corriendo.

-Justamente tenían que aparecer ahora.- mencionó él mientras seguían a aquellas personas, molesto. Pero la chica que iba a su lado caminando iba con una sonrisa recordando ese beso extraño, y el primero que se daban. Tal vez no pudieron volver a besarse, pero estaba claro que no sería la última vez que lo hicieran.

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y saber que todo esto salió gracias a mi imaginación viendo un edit de tiktok de aki fumando, con la canción de 'i was never there' JAKSJAJA

Y YA VIERON EL SEGUNDO TRÁILER DE CSM?? LA VOZ DE AKI, AKI CON EL PELO SUELTO, FUMANDO Y TODO AKZBSJS me tiene mal este varón

06/08/22