COLD HEART - Kookmin

Capítulo 24

Jimin se apresura para ir al tribunal a ver a Jungkook, hoy comienza el juicio en contra de él y de su primo Hoseok. Está muy ansioso, pues no lo ha visto desde hace mucho tiempo, pero haber escuchado de boca de la madre de Jungkook, le da esperanzas de que volverá a estar junto a él. Sin embargo, todo dependerá de lo que se resuelva en el juicio.

Al ver a Jungkook entrar a la sala de la corte, el corazón de Jimin se estremece. Se le aprieta el estómago y se le forma un nudo en la garganta que le impide respirar bien. Traga saliva y parpadea tratando de que las lágrimas que inundan sus ojos no caigan por sus mejillas.  Sin embargo, es inútil, su rostro ya está humedecido y sus ojos vidriosos y rojizos.

Jungkook entra esposado bajo la atenta mirada de su madre, quien mantiene una postura inquebrantable, aunque su rostro denota una profunda tristeza y preocupación.

El guardia le quita las esposas y luego Jungkook saluda a su abogado, un hombre mayor que estrecha su mano y luego palmotea su espalda con genuino aprecio. Antes de sentarse, Jungkook mira de reojo hacia el fondo de la sala y lo ve. Ve a un lloroso Jimin y se desmorona por completo. Se sienta y se cubre el rostro con ambas manos. 

Obviamente, Namjoon no se encuentra en la sala porque luego de haber despertado, los médicos se dieron cuenta de que tenía un grave daño neurológico, así que decidieron inducirlo en coma y así ha estado desde entonces. En su lugar, sentado junto al abogado demandate está su padre y detrás de ellos, el resto de su familia: su madre, su hermana menor Hana y su hermana melliza Lisa y exnovia de Jungkook, quien deja entrever su incipiente embarazo.

Ese día solamente se expone el caso, el abogado de la familia de Namjoon explica la demanda y luego el abogado de Jungkook y Hoseok exponen su defensa. La preparación del juicio es breve, cuando el juez concluye la audiencia, Jungkook se pone de pie, voltea hacia atrás y su mirada se cruza con la de Jimin. Los labios del pelinegro se mueven solo para entregarle un preciso mensaje al sollozante rubio: "Te amo", quien le responde de la misma manera mientras sus lágrimas recorren sus mejillas.

Los guardias sacan a Jungkook y a Hoseok de la sala y Jimin permanece sentado mirando sus manos como queriendo encontrar consuelo en ellas.

-Ven conmigo -le dice una temblorosa y dulce voz.

Jimin toma la mano extendida de la madre de Jungkook y ambos salen de la sala. Cuando ya están en el exterior del tribunal, Jimin saca un pañuelo de papel de su bolsillo y seca sus lágrimas una vez más.

-¿Dónde vamos? -le pregunta luego de botar el papel en un basurero que está a su costado.

-Iremos al departamento en donde está viviendo mi hijo. Sé que ambos se han extrañado durante  mucho tiempo y se deben una conversación. El rostro de Jimin se ilumina, sus ojos se agrandan levemente y una tímida y hermosa sonrisa se asoma en sus labios.

De camino al departamento, el nerviosismo se apodera de Jimin y se deja llevar por sus pensamientos, mientras la madre de Jungkook se mantiene ocupada hablando por teléfono.

        Por fin lo volveré a ver, después de tanto tiempo.

        Quiero abrazarlo y decirle cuánto lo he extrañado.

-¡Llegamos! -le dice la Sra. Jang, mientras el vehículo entra en el oscuro estacionamiento.

-¿Él sabe que vengo con usted?

-No, pero te aseguro que estará muy feliz de verte -le dice ella.

Cuando el vehículo finalmente se estaciona, Jimin y la Sra. Jang se bajan de él.

-Espérame aquí, volveré enseguida -le dice ella al chofer.

Luego ambos ingresan al edificio, entran al ascensor y suben hasta el último piso. Llegan hasta la puerta y la madre de Jungkook llama al teléfono de su hijo para avisarle que está en la entrada. Su abogado abre la puerta.