El gran partido había llegado y todos estaban emocionados, las gradas estaban llenas de personas apoyando a ambos equipos y gritando en apoyo a su escuela. Los gritos con el nombre de Jackson se habían hecho cada vez más fuertes a medida que los jugadores salían, muchos de ellos estaban algo celosos de como el pelinegro se llevaba toda la atención de las personas, pero ninguno diría nada.
Jackson por su parte estaba con la mente en el juego, ahora los gritos no importaban. Lo importante era la victoria, si no había victoria entonces habían fallado. El entrenador seguía hablando con ellos dando las jugadas, tenían que quitarle el balón a Ryan, el jugador estrella del otro equipo. Jackson estaba harto de ese tipo desde que había empezado a jugar con el equipo, simplemente lo odiaba. No un odio como el que le tenía a Mark, odio real. Ryan siempre jugaba sucio de manera discreta, nadie podía notarlo por ello lo llamaban "el rey" en su escuela, aún cuando todos decían que era un jugador sucio siempre decían que era envidia porque habían perdido. Eso lo ponía enfermo.
— Recuerden mantenerse alejados de Ryan, los puede herir. Mark en especial tú, no queremos que te lesiones — el entrenador finalizó y todos asintieron.
Salieron a la cancha y el balón cayó a favor de los lobos, Ryan había tratado de quitar la pelota de la mano de Chris pero este fue mas rápido y la pasó a Mark para que encestara, lo cual no hizo, le pasó el balón a Jackson, este estaba casi a la mitad de la cancha. Chris enojado corrió hacía Mark y lo empujó un poco, en su molestia no vio el perfecto tiro que había hecho Wang, 3 puntos.
— Si tiraba yo sería un punto, si lo hacía Jackson 3 — finalizó Mark con indiferencia.
— ¿Y si fallaba?
Mark rió y siguió el juego, Jackson era más propenso a fallar un tiro cerca a uno lejos. Iniciar el partido fuerte hacia que los visitantes se sintieran presionados, las águilas ni siquiera habían podido tener el balón más de 5 segundos en la mano luego del primer tiro de los lobos, el marcador era vergonzoso de ver 14-0. Era de esperarse que pidieran un tiempo, en lo que ellos descansaban los otros trataban de idear un plan para poder igualar las condiciones.
— No se confíen. Saben que las cosas con las águilas hay que tomarlas con cautela. Son tramposos.
Esas fueron las palabras del entrenador antes de que el descanso terminara. A pedido de Chris fue Mark el que recibiría el balón. Ahí estaba cara a cara con un Ryan sonriente que le generaba un poco de molestia luego de escuchar como hería a los otros jugadores para ganar un partido.
— Parece que ahora también juegan niños bonitos — Ryan sonrío coqueto y puso su mano sobre la de Mark, nada raro, trataba de bloquearlo — ¿No hablas?
Mark no respondió, en cambio cuando el árbitro tiró el balón en el aire lo tomó y empezó a defender para luego pasarle el balón a Jake, no lo tuvo ni 3 segundos cuando Ryan de manera sutil le había pisado el pie y quitado el balón, luego de eso todo fue de mal en peor. La mayoría de los jugadores ya habían recibido algún golpe de parte de las águilas, el marcador ya no era favorecedor para los lobos y eso los tenía molestos. Mark estaba demasiado callado mientras todos se quejaban sobre el equipo contrario.
— ¿Te pasa algo? — negó —. Parece que sí.
— Estaba pensando nada más, podemos ganar sólo con 3 puntos.
— Es difícil con un agresivo de mierda en la cancha.
— ¿Con esa boca besas a tu novia, Jake? — ambos rieron —. Podemos, sólo tenemos que dejar el campo libre para que Jackson enceste.
— Agh darle más fama a la estrella.
— Lo que importa es ganar, nosotros lo cubrimos le pasamos el balón y encesta tiros de 3 puntos, todos ganamos.
