Quien eres en realidad parte 2

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Bakub no había regresado en algún tiempo, por lo que el rey permitió que su hija caminara por los jardines ya que el yautja había prohibido estrictamente que ella saliera al bosque, Erick el joven príncipe se ofreció a visitarla para platicar con ella, estaba perdidamente enamorado de ella y aunque ya no podía tenerla como esposa, por lo menos quería estar cerca. Mel gustaba del joven príncipe y le gusta a su compañía alegre gallarda.

- Príncipe Erick!!!

- Princesa Mel!!!

Erick abrazo fuertemente a Mel aspirando su aroma y enterrando su cara en sus rizos rojos, ella lo abrazo con fuerza acorrucándose en el, Mel le gustaba tanto tenerlo cerca. Erick platico con ella todo el día y sus visitas ya se hacían cada vez más frecuentes, Bakub llevaba dos meses sin venir por lo que Mel estaba feliz de la vida, sin embargo Bakub estaba inquieta cazando, no podía dejar de pensar en ella, su piel, su aroma, sus ojos, sus mejillas...sus muslos regordetes y suaves y el aroma de su coño, lo habían marcado inevitablemente, quería regresar, regresar donde estaba ella y eso lo molesto, Yautja no se arraigaba a nadie ,las hembras cuidaban a los cachorros mientras los machos cazaban pero estaba claro que esta situación era diferente, pensó considerablemente en traerla a su barco así no suspendería las cacerías y la mantendría vigilada, había pospuesto la caza de mala sangre por cacerías , eso es lo que haría al finalizar esta cacería, regresaría por ella y la traería arrastrando si era necesario a su barco.

Mel sonreía feliz mientras Erick la empujaba en el columpio, sin saber que ese día Bakub había regresado de la cacería informando a su padre de su regreso, se dirigió rápidamente a las habitaciones de su compañera, pero no la encontró, sin embargo se asomó por la ventana al escuchar risas, sus mandíbulas se extendieron agresivamente cuando vio a otro macho cerca de ella, y lo peor, el macho la alimentaba con esa cosa dulce que ella comida mientras le limpiaban la boca, como se atrevía a faltarle al respeto de ese modo y en su ausencia, ella era omman no yautja no eran iguales, según sus códigos ella debía serle solo fiel a el, y eso lo encolerizo, la omman era suya, solo el podía tocarla y acercarse así .Sin pensarlo Bakub salto ferozmente cayendo de pie y caminando con gran velocidad tomo al joven del cuello alzándolo mientras gruñía con fuerza que Mel tuvo que taparse las orejas.

- Bakub no!!!

- Así que esta era tu pequeña diversión mujer, no perdiste el tiempo en buscar a otro, me niegas lo que por derecho me corresponde y lo brindas sin problemas a otro.!!!

- No,..no es lo que piensas el es mi escolta es mi mejor amigo por favor Bakub te lo ruego bájalo!!!

- ¡¡¿Amigo, tocándote de esa manera sabiendo que estas atada a mi?!! ¡¡¡Que tal si le arranco la espina en este momento y lo coloco como un insignificante trofeo para recordarte tu posición conmigo!!!

- Bakub basta, tu me fuiste infiel el mismo día que nos casamos!!!

- ¡¡¿Así que esta es tu forma de vengarte mujer?!!

- No estoy vengándome, pero no deberías hablar de lo que no sabes, bájalo estas lastimándolo¡!!

- Esta será la última vez que este insignificante macho viene a verte, la próxima vez que lo vea cerca será la última.!!

Bakub arrojo al aterrorizado Erick al suelo, Mel corrió hacia el pero Bakub la sostuvo en brazos echándola al hombro, sentirla era algo que no podía negar disfrutar, ese aroma suyo lo traía perdido, su suave cuerpo de hembra no acostumbrado a tocar algo así. Su padre salió con todo el alboroto mirando la escena, el yautja pasó imperante a su lado.

La princesa omman y el principe yautjaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora