Capítulo 19

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—¿Qué es lo que siempre has querido pero nunca has tenido?—. preguntó la pelirroja recostada en el pecho de la castaña.

—Un perro.— respondió la castaña sin dejar de hacer caricias en el cabello de la pelirroja. —Pero mi padre nunca nos dejó a Steve y a mi tener uno.

—¿Por qué?—. volvió a preguntar.

—Decía que solo sería un estorbo.— suspiro. —Que con mi hermano y conmigo tenía suficiente para soportar a un perro.

La pelirroja se levantó del pecho de la castaña para verla. —¿Y todavía te gustaría tener uno?—. la castaña asintió.

—¿Y tú?—. preguntó la castaña acariciando la mejilla de la pelirroja. —¿Qué es lo que siempre has querido?

—Siempre he querido hacer una pijamada.— bajo la mirada. —Pero como no tenía amigos en California por ser "rara" nunca hice una.

—Amor.— la castaña abrazo a la pelirroja. —Tu no eres rara.— dijo y depositó un beso en la coronilla de la pelirroja.

—Si lo soy.— murmuro la pelirroja. —Por eso nunca he tenido amigos.

—Claro que no.— se separó del abrazo la castaña.

—¿Entonces por qué nunca he tenido amigos?—. preguntó bajando la mirada.

—Porque ninguno es digno de ser tu amigo.— acaricio la mejilla de su novia. —Todos son unos idiotas.

La pelirroja se acercó a la castaña y dejó un pico en sus labios.

—¿Billy está en su habitación?—. preguntó la castaña después de unos segundos.

—Si.— respondió la pelirroja confusa. —¿Por qué?

—Quiero hablar con el.— se levantó de la cama de la pelirroja. —No tardó cielo.

Leah salió de la habitación de la pelirroja. Max no le tomó importante y tomó su cómic de wonder woman para terminar de leerlo.

La castaña se dirigió a la habitación de Billy y cuando llegó vio la puerta de la habitación abierta y entró.

—Necesito tu ayuda.— dijo viendo a Billy el cual estaba acostado fumando un cigarrillo.

—¿Para qué?—. colocó su cigarrillo el el cenicero.

—Quiero hacer una pijamada.— respondió.

Billy comenzó a reír. —¿Una pijamada?—. dijo riendo. —¿No estas grande para eso?

—No es para mi.— dijo la castaña cruzándose de brazos. —Es para tu hermana, me dijo que siempre ha querido hacer una.

—¿Pero a quienes traerás?—. preguntó en un tono más serio Billy. —Max no tiene amigos.— dijo despacio.

—Lo sé.— suspiro la castaña. —Pero para eso estas tú, mi hermano y yo. Nosotros haremos ayudaremos a que tenga su pijamada.

Leah le contó su plan a Billy y cuando decidieron que haría cada quien. Al terminar de hablar sobre el plan la castaña salió de la habitación de su mejor amigo para ir a la habitación de su novia.

—Me tengo que ir cariño.— dijo la castaña sentándose a lado de su novia.

—Creí que te quedarías.— dijo triste.

—Lo siento amor, pero necesito hablar de algo importante con Steve.

—¿Y no puede esperar a mañana.— preguntó con esperanza se que su novia se quedará a dormir.

The desire to love forever | Max MayfieldWhere stories live. Discover now